PROLIFERAN TIRADEROS DE BASURA…


*A pesar de las mejoras en el servicio de recolección

Roberto Antonio Márquez Añorve
Una de las prácticas que más afectan la imagen de esta ciudad “Cuna de la Bandera Nacional”, son los montones de basura que generan focos negros de contaminación en casas abandonadas, lotes baldíos, margen de canales e incluso en calles de la ciudad que ponen en riesgo la salud de avecindados ante la proliferación de fauna nociva, esto a pesar del regular servicio de recolección.
La adquisición de nuevas unidades recolectoras de basura por parte del gobierno municipal que preside el arquitecto David Gama Pérez, así como la sectorización de la ciudad a efecto de establecer días de rutas, no ha sido suficiente para frenar el creciente surgimiento de focos negros de contaminación por basura que además del impacto de imagen urbana y ambiental generan riesgos de infección, ya que las altas temperaturas provoca la descomposición de los desechos que son arrojados sin el mayor cuidado.
Lo antes expuesto, provoca además fétidos olores, porque además de la basura, son puntos para tirar animales muertos como perros o gatos en bolsas de plástico o cajas de cartón, como sucede en varios de los lotes ubicados en la transitada calle Caritino Maldonado e inmediaciones, a donde acudió El Diario de la Tarde, en atención a denuncias de ciudadanos que piden la intervención inmediata de las autoridades competentes, obligando a dueños de lotes baldíos y casas abandonadas a mantener limpio, o que el ayuntamiento limpie y les cobre el servicio.
Los mismos quejosos, piden mayor vigilancia y aplicación de sanciones correspondientes a quienes sorprendan realizando estas negativas prácticas que atenta en contra de todos porque, por ejemplo: hojas de papel o de un árbol tardan en degradarse de 8 meses a un año, no así las latas de aluminio que tardan de 10 a 100 años dependiendo del grosor y tamaño; los materiales de plástico tardan entre 100 y 300 años en degradarse; los pañales desechables hasta 500 años, y así podemos seguir hasta llegar a la conclusión del daño que estamos causando al medio ambiente, al entorno en que vivimos y a nosotros mismos.