Negligencia en el “Royal Care”


Ciudadano denuncia y exige reparación del daño…
*   Operaron a su mamá y le dejaron un catéter durante más de un año 
*   La paciente podría perder un riñón y ahora se niegan a darle atención
Carlos Noé Rojas Castrejón denunció públicamente un caso de presunta negligencia médica en contra de personal médico del Hospital privado “Royal Care” de Iguala, donde operaron a su mamá y le dejaron un catéter sin consentimiento de la familia durante más de un año.
     
Rodolfo Soto Parra

El joven Carlos Noé Rojas Castrejón, denunció públicamente una presunta negligencia por parte del personal médico de la Clínica privada "Royal Care" de Iguala, donde dijo que en el mes de Febrero del año 2017 operaron a su mamá por un diagnóstico de cálculos en el riñón, y le dejaron sin su conocimiento un catéter durante más de un año, lo que le provocó una severa infección en las vías urinarias que la pone el riesgo de perder dicho órgano, por lo que demanda que el nosocomio se haga responsable de su atención y los gastos que le ha generado la compra de medicamentos para su tratamiento.
En entrevista, relató que operaron a su mamá el día 20 de Febrero del año 2017 con un diagnóstico de cálculos en el riñón, pero la dieron de alta y nunca le dijeron que le habían dejado un catéter, por lo cual le quitaron los puntos de suturación y la sonda que le dejaron como procedimiento de dicha operación.
Sin embargo, en el transcurso del 2017 tuvo varias molestias, y en este año 2018 le mandaron hacer un nuevo estudio donde resultó que tenía el catéter, situación que no les dijeron, “porque un familiar no va a permitir que llegue a ese grado cuando el catéter puede estar un tiempo máximo de 5 meses posterior a la intervención quirúrgica”, subrayó.
Rojas Castrejón agregó que enseguida le marcó a la persona responsable del hospital "Royal Care" en Iguala, quien le contestó que se presentara al otro día para retirarle el catéter, toda vez que el procedimiento sería vía vaginal, pero como el catéter permaneció durante 13 meses se calcificó, “y cuando la ingresaron al quirófano nos dijeron que sería normal, pero a las 2 horas salieron y nos dijeron que no se podría retirar vía vaginal. En consecuencia se tardó 6 horas más en el quirófano. Posteriormente la dieron de alta y no les cobraron este nuevo procedimiento, porque según hasta ahí era el apoyo del hospital”.
Enfatizó el joven denunciante que le recetaron mucho medicamento porque tenía una infección en las vías urinarias, “con lo que estamos gastando alrededor de 1,000 ó 1,500 pesos diarios por el medicamento, del que exhibió las recetas y los tickets de compra, y desde que la operaron hasta la fecha continúa con la infección, por lo que ésta llevará alrededor de un mes.
Asimismo señaló que al hacer del conocimiento esta situación, “nos contestó una doctora del hospital "Royal Care" diciéndonos que ya no se harían responsables, y de hecho el día Sábado se volvió a poner mal durante la madrugada y fueron a dicho hospital, donde supuestamente no había doctor de guardia y no la quisieron atender, por lo que mi papá la trasladó al Perisur aquí en Iguala, donde la atendieron y le dijeron que se trataba de una infección y que necesitaba realizarse un nuevo estudio para que le confirmaran si se trata de la misma bacteria que está afectando, aunque le advirtieron que ya está en peligro su riñón por dicha infección”.
Reiteró que los doctores del hospital "Royal Care" nunca se hicieron responsables de ningún medicamento, “y en esta ocasión le realizaron un procedimiento que nunca se tuvo que haber realizado. Quien la operó la primera ocasión fue un doctor de apellido Urbina, quien desde la operación se lavó las manos diciendo que él sólo venía, operaba y se retiraba porque es de la ciudad de Cuernavaca, pero no queríamos hacer nada porque un familiar trabaja en dicho lugar como anestesióloga, sin embargo creemos que ya fue demasiado esta situación”.
Precisó que también les dijeron “que si queríamos demandar que demandáramos, porque estamos en nuestro derecho, pero que no pasaría de que se quemara la clínica. Lo único que estamos solicitando como familiares es que atiendan a mi mamá porque el fin de semana que la llevaron no la quisieron atender bajo el pretexto de que supuestamente no había un médico de guardia, cosa que es imposible en una clínica privada, pero sobre todo que al menos se hagan responsables de los medicamentos que se han comprado porque mi mamá no tiene solvencia económica, tiene una fondita y no ha trabajado por su estado de salud y en consecuencia no genera ingresos”.
Por último comentó que este Domingo pasado “mi mamá se presentó nuevamente para que la revisaran y le cobraron la cantidad de 1,200 pesos entre medicamento y consulta; incluso cuando se retiró traía suero, pero ya no se quieren hacer responsables de nada como antes, cuando al menos los estudios que le realizaban corrían por parte del hospital y ahora se tiene que hacer un nuevo estudio, pero todo corre por cuenta de la paciente, así como el retiro del nuevo catéter que le dejaron en la segunda operación que le realizó nuevamente el doctor Urbina. A la fecha mi mamá lleva nuevamente 3 días con temperatura por ratos, misma que le da y se le quita”.
Cabe mencionar que su mamá se llama Leticia Castrejón Ramírez, tiene la edad de 49 años, y por la primera operación se pagaron alrededor de 30 mil pesos.