Noé Mondragón Norato
Los tres ninguneos políticos de Apreza
En
algún momento titubeó. Se quiso pasar a la oposición. Una nota informativa
fechada el 17 de mayo de 2006, señaló que “el ex
dirigente estatal del PRI, Héctor Apreza Patrón y el ex alcalde de Taxco, Isaac
Ocampo Fernández, podrían sumarse hoy a las Redes Ciudadanas que promueven la
candidatura de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República”.
Sin embargo, algo pasó. Intervino el entonces candidato derrotado al gobierno
de la entidad, Héctor Astudillo Flores. Eran momentos de incertidumbre
y reacomodos en el priísmo local. Lo cierto es que Apreza
Patrón, se quedó en el ese partido. Y emigró del grupo
político de René Juárez Cisneros, al del propio Astudillo. De ahí se lee lo
demás.
APREZA: ¿NINGUNEO POLÍTICO?- Desde la elección federal de 2006, Apreza
aspiró a pasar al Senado de la república. Y ya en el repechaje, a
la diputación federal plurinominal. El candidato presidencial de ese entonces,
Roberto Madrazo Pintado, se la negó. Y en respuesta, lo
declaró persona non grata en Guerrero. Apreza
fue ninguneado políticamente. Por primera vez. Lo que
siguió fue la calma. Se configuraron caminos. También destinos políticos. 1.- Durante
el segundo periodo de Héctor Astudillo, como alcalde de Chilpancingo
(2008-2012), Héctor Apreza, fungió como su asesor. Y de hecho,
arribaron juntos a la diputación local por la vía plurinominal en el 60
legislatura (2012-2015). El equipo político funcionaba a la perfección. Pero
pudo más la alianza política del actual gobernador de la
entidad, con Manuel Añorve Baños. Porque en la definición del candidato al
Senado tricolor, la balanza política se inclinó a favor de éste último. La
Senaduría que Apreza disputaba internamente en el PRI, se le negó de
nuevo doce años después. Una negociación política de
último minuto en el estado de Sonora, el pasado 26 de enero, entre
Manlio Fabio Beltrones Rivera y José Antonio Meade, favoreció al ex edil
priísta de Acapulco, quien se registró formalmente como candidato al Senado, un
díadespués de ese encuentro. Pero Apreza volvió a disciplinarse. Hasta
acudió a la ceremonia de registro. Lo cierto es que el gobernador ya
tenía pactada la entrega de esa candidatura. Y el
beneficiario político era desde siempre, Manuel Añorve. El ex secretario de
Finanzas, volvió a quedarse ninguneado políticamente. Y
en el camino. 2.- Pero la historia no termina ahí. Se
configuraba otro ninguneo político. Porque en aras de pagar sus compromisos al
interior de su grupo político familiar,el gobernador sacó de la
Secretaría de Finanzas a Héctor Apreza, y lo ubicó en el primer lugar de
la lista de diputados locales plurinominales por el PRI. Se entiende que
intenta jubilarlo en el Congreso local. El punto sin
embargo, es que desde el punto de vista estratégico, la
Secretaría de Finanzas es mejor, que la curul local. La
señal en ese sentido es bastante clara: Tulio Samuel Pérez Calvo, puede esconder mejor
las eventuales irregularidades financieras, que Apreza Patrón.
Porque es familiar del gobernador por
la vía sanguínea a través de su esposa, Mercedes Calvo. Hay un dato que
perturba al respecto: las observaciones por más de 3
mil millones de pesos de la cuenta pública 2016, hechas
por la Auditoria Superior de la Federación (ASF). ¿Fue acaso ese el
error político cometido por Héctor Apreza, para
enviarlo como repetidor por tercera vez en la
curul local? ¿Es una forma de cerrar su ciclo político, en función de que
Astudillo, terminará su periodo de gobierno, cuando Apreza concluya también, su
trabajo legislativo? ¿O es el cuadro político emergente en
el fortalecido y real escenario, de que Manuel Añorve, no pase
al Senado? Como sea, Apreza fue ninguneado por tercera
vez.
HOJEADAS DE PÁGINAS…El único personaje que podría levantar la
campaña del aspirante del PAN-PRD-MC a la alcaldía de
Acapulco, Joaquín Badillo; es el actual edil perredista, Evodio Velázquez
Aguirre. Quizá por esa razón, enseñará el músculo de su
tribu Nueva Mayoría ayer domingo. Y en esa lectura podría estar encerrada la
llave del triunfo. O la derrota de esa coalición.