Era empleado del “Modelorama”, el joven de Mayanalán


“Nada tenía que ver, pero…”
Que era empleado, “mandadero” y hacía el aseo en el “Modelorama de la Muerte”, ubicado a orillas de la carretera Iguala-Chilpo, a la altura de Rancho del Cura, el joven acribillado a media carretera, identificado como Mauricio Figueroa Sánchez, de 22 años, originario y vecino de Mayanalán, municipio de Tepecoacuilco de Trujano.

Agencias

“Si era empleado del ‘Modelorama’, pero nada tenía que ver en los hechos”, según las versiones escuchadas horas después de la doble ejecución perpetrada en dicho establecimiento comercial, localizado a orillas de la carretera Iguala-Chilpancingo, a la altura de la comunidad de Rancho del Cura.
Lo anterior, en relación al joven Mauricio Figueroa Sánchez, de 22 años de edad, de ocupación albañil, con domicilio en la calle Nicolás Bravo de la comunidad de Mayanalán, perteneciente al municipio de Tepecoacuilco de Trujano.
Familiares que reclamaron su cadáver, se limitaron a decir que desconocían los hechos, pero que Mauricio era una persona “tranquila, que se dedicaba a trabajar, sin meterse en problemas”.
Y efectivamente, trascendió que laboraba “de mandadero” y haciendo el aseo en el referido “Modelorama”, donde apenas el pasado Martes por la tarde, irrumpió un grupo de hombres armados, presuntos sicarios, y le dieron muerte junto con su patrón, Antonio Bahena Mena, de 50 años, originario y vecino de Rancho del Cura, que era el encargado del establecimiento y por quien presuntamente iban los pistoleros.
Pero Mauricio, al ver la acción, salió corriendo buscando salvar la vida, misma que perdió al ser acribillado cuando había alcanzado la mitad de la carretera, al exterior del negocio, donde quedó tirado, en medio de un charco de sangre.