Noé Mondragón Norato
Adversarios del
PRD son aspirantes por Acapulco
La estrategia parece simple: arrebatarle al PRD el
control político del municipio más importante de la entidad: Acapulco. Los últimos
movimientos de muchos actores, confirman que el PRI y el gobernador Héctor
Astudillo, están instalados en esa senda. La radiografía es apenas,
emblemática.
GANAR
PERSUASIVAMENTE.- Tras el
anuncio oficial en el sentido de que el actual edil
perredista, Evodio Velázquez Aguirre, no irá a buscar la reelección en
la alcaldía porteña, muchos actores se desataron. Y se sumaron a otros que ya
presionaban para alcanzar esa candidatura: Se lee así: 1.- Como “candidatos
externos” del PRD, aparecieron dos personajes con
inevitable arraigo y sello priísta: el ex candidato a la
alcaldía por el Partido Verde, Joaquín Badillo Escamilla. Y el también ex
aspirante, Marco Antonio Terán Porcayo, quien perdió la
elección de junio de 2015, frente al actual edil perredista. Ambos personajes
fueron movidos por los dos líderes de sus grupos: el candidato
al Senado, Manuel Añorve Baños, en el primer caso. Y el ex gobernador René
Juárez Cisneros, en el segundo. La intención apunta hacia una sola dirección:
generar y ahondar una eventual división perredista que le permita
al PRI, regresar a la comuna acapulqueña. Y de la mano de priístas
reales, disfrazados de opositores. 2.- En la
lista de aspirantes, aparece el diputado federal plurinominal perredista por
Michoacán, David Jiménez Rumbo, quien lo mismo batea para el PRI y
también para el PRD. Es decir, para donde mejor
sople el generoso viento de sus intereses personales y de tribu. El punto es
que dicho personaje ha logrado muy buenos entendimientos políticos tanto
con el gobernador Héctor Astudillo, como con el propio Manuel Añorve, cuando
éste último despachó como alcalde de Acapulco. Camuflado con la roída
vestimenta de la exigencia democrática,Jiménez Rumbo,
busca la candidatura a la alcaldía por su tribu el GG, no tanto para ganar
la elección, sino para encarecer la negociación poselectoral
con el PRI. Y con las tribus perredistas también. Es una especie
de Caballo de Troya, con impactos políticos letales
en el PRD. 3.-Finalmente, el diputado local por el partido
Movimiento Ciudadano (MC), Ricardo Mejía Berdeja, es otro aspirante que
intenta quitarle la candidatura al PRD, bajo el pretexto de
que la Alianza por México (PRD-PAN-MC), cumpla con los acuerdos
pactados. El punto es que Ricardo, ha sido un acérrimo
adversario político del actual edil, Evodio Velázquez. Y aprovechando
su papel como diputado local, lo atacósistemáticamente desde la tribuna
legislativa. Todo lo anterior se entiende: el dueño del MC en Guerrero,
Luis Walton Aburto, tiene un acuerdo político inconfesable con
el gobernador Héctor Astudillo. Y cómo en el caso de Jiménez Rumbo, la idea es
simple: Mejía Berdeja, no llegará como hipotético candidato de esa Alianza, a
generar las condiciones para ganar la elección, sino
para “plancharle” la cancha al candidato del PRI. En
este caso, al añorvista, Ricardo Taja Ramírez. Por
eso, el PRD juega su baraja política más
importante y más cara, en Acapulco. Y si la cede,
quedará descabezado y sin fuerza política para enfrentar los
retos de la elección de gobernador en 2021. Camuflados y hasta
de manera directa, los aspirantes de casa y aquellos “externos”
manejados por el PRI, ya entendieron la lección. Y están tratando de
aplicarla. Nada más.
HOJEADAS DE
PÁGINAS…En el PRI-Guerrero, el rector
de la UAGro, Javier Saldaña Almazán, tiene dos cuadros suyos “sembrados” como “avanzada”, en
el trayecto de apuntalar las aspiraciones de su esposa, Arely Almazán Adame, en
la diputación local plurinominal: Olivia Álvarez Montalban y la cubana, Kirenia
Arbelo Plascencia. El punto es que Arely nunca ha hecho vida partidista
al interior del PRI. Pero el gobernador Héctor Astudillo, y el
candidato al Senado, Manuel Añorve, son generosos con
sus más fieles amigos.