Noé Mondragón Norato
Cinco escenarios de desastre para el PRI en la capital
La
disputa electoral por Chilpancingo, ya dio inició. No solo con el registro de
la diputada federal con licencia, Beatriz Vélez Núñez, como candidata formal
del PRI, sino con el perfilamiento también de dos personajes que
le van a generar una fuerte competencia electoral: el aspirante del PRD,
Antonio Gaspar Beltrán. Y el del PAN, Servando de Jesús Salgado Guzmán. La
radiografía no pinta nada bien para un partido que,
históricamente ha retenido la capital para los tricolores. Pero
que hoy enfrenta la amenaza latente de perderla. Hay que
pulsar los escenarios.
PRI: APOYOS CAÍDOS.- En gran parte del electorado de la capital y de otros
municipios guerrerenses, cunde el desencanto hacia el PRI. No
solo por los errores y escándalos sistemáticos del
presidente Enrique Peña Nieto, sino también y sobre todo, por el
mal gobierno encabezado por Héctor Astudillo Flores. Los factores de
la inminente derrota electoral en Chilpancingo, están muy expuestos: 1.- El
factor Marco Antonio Leyva, está llamado a convertirse en el detonante. Porque
si el Congreso local le niega la posibilidad de retornar
como alcalde, el escándalo afectará sensiblemente a la candidata del
PRI, quien es muy dada a tratar de convencer con puros
discursos del pasado, sin darle cauce a sus compromisos
con los electores. 2.- El deficiente desempeño del actual
edil, Jesús Tejeda Vargas, complementa los escenarios de desastre. El alcalde
tricolor suplente, no ha podido con los cuatro
problemas prioritarios que le heredó Marco Leyva: la
seguridad pública, la recolección de basura, el suministro de agua potable y el
bacheo de las principales calles y avenidas de la capital. Tejeda está
operando. Pero contra los intereses del PRI y de su candidata. 3.- La
inconformidad interna, también será determinante. Hasta hoy, ni el PRI
nacional ni el local ni el propio gobernador Astudillo, encuentran el camino
para mantener la unidad tricolor. En este carril, figuran dos
personajes: el delegado del ISSSTE, Mario Moreno Arcos, cuyo capital político
sería determinante para concretar el escenario de las derrotas
tricolores. Y el del ex aspiranteaguirrista, Jorge Salgado Parra, quien
está fuera del reparto. 4.- La candidata del PRI, Beatriz
Vélez, no pertenece al primer círculo
político del gobernador Héctor Astudillo. Y además, como diputada
federal aprobó la Reforma Energética que dio origen a los
gasolinazos de enero de 2017, a la fecha. En ese sentido, se
torna sacrificable en términos electorales. Un
punto fue perturbador al respecto: el hecho de cambiar a
César Armenta Adame –secretario particular del mandatario estatal priísta-, de
aspirante a la alcaldía capitalina, a candidato a diputado local por el
distrito 1, donde las posibilidades de triunfo se amplían
raquíticamente. El mensaje es claro: si pierde la capital, el
gobernador no quiere hacerlocon los cuadros de su
primer círculo de poder. 5.- Si el PRD o el PAN ganan
la elección, el gobernador Astudillo, perderá
ganando. Porque con un eventual gobierno opositor, se quitará las
presiones en materia de seguridad y servicios públicos. Compartirá
culpas y responsabilidades que hoy no puede, con
el gobierno tricolor enquistado en el ayuntamiento capitalino. Y si
el gobernante municipal opositor lo hace mal y resulta peorque
Leyva Mena o Tejeda Vargas, será una forma de ajustarles cuentas a los
ciudadanos de la capital que no votaron por él, en la
elección de gobernador de febrero de 2005. Ni de su candidata a edil. Por
aquello de la vigencia y permanencia de los
rencores. El PRI incuba su inminente derrota en
la capital. De eso no hay ya, ninguna duda.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Como en Chilpancingo, en el municipio de
Iguala, el figueroísta y ungido candidato a la alcaldía, David
Gama Pérez,rema a contracorriente. Porque al tibio y
mediocre desempeño de Esteban Albarrán Mendoza, como efímero alcalde,
se sumaron las corruptelassistemáticas del actual Herón
Delgado Castañeda. Y no se sabe cómo y con qué, pretende
retenerla para su partido, el PRI.