Noé Mondragón Norato
Los efectos de una
emboscada
Uno de los
asuntos en los que ha guardado silencio la Secretaría de
Seguridad Pública, está relacionado con lo que ocurrió en la
emboscada contra agentes de la PGR, ocurrida el pasado lunes por la
madrugada en la comunidad de La Gavia. Y que arrojó un saldo de cuatro
agentes fallecidos y siete heridos de acuerdo a la
confirmación hecha por la propia dependencia federal. Lo que sí se advierte, es
una incipiente ruptura entre el gobierno federal y el estatal.
Hay que ir por partes.
¿FUEGO AMIGO?- Cuando
los agentes de la PGR irrumpieron en el municipio de San Miguel Totolapan, el
objetivo que perseguían era claro: atrapar a Raybel Jacobo de
Almonte, líder del grupo criminal Los Tequileros, pues contaban coninformación
de inteligencia en el sentido de que pernoctaba todas las noches en La
Gavia. Y de ahí se abrió lo demás: 1.- La misión era secreta.
Por eso, las camionetas no detuvieron su paso. Ni en el retén de La Marina, ni
en el de la Policía Estatal. El punto sin embargo, perturba: ¿Cuál es el fin de
ambos retenes? ¿Acaso no permitir la confrontación a balazos
entre los grupos criminales La Familia Michoacana y Los
Tequileros? ¿Están como árbitros de ambos grupos
delictivos, en vez de combatirlos? Una cosa es cierta: la seguridad a
la población no está garantizada con su presencia. Desde
esa perspectiva,ambos retenes resultan ociosos e inútiles. Y el
oficial David Portillo Menchaca, coordinador de la Policía Federal en Guerrero,
admitió que sí hubo filtración de ese operativo por
parte de las fuerzas de seguridad, que después derivó en el ataque a balazos
contra los oficiales de la PGR. No dijo si provino de La Marina o de la Policía
Estatal. Pero hasta el momento, el titular de la Secretaría de Seguridad
Pública (SSP), Pedro Almazán Cervantes, no ha salido a fijar postura al
respecto. 2.- Elenfrentamiento a balazos duró aproximadamente cuatro
horas, de acuerdo a los testimonios de los agentes heridos en la
refriega. Y a pesar de que solicitaron ayuda oportunamente, a
las fuerzas de seguridad –se entiende que a los agentes instalados en ambos
retenes, por su proximidad-, está no llegó sino hasta el
amanecer. ¿Por qué razón ni los infantes de La Marina ni los policías estatales
acudieron al llamado? ¿Acaso no existe la coordinación entre las fuerzas
policiales ni la activación de los protocolos de seguridad en casos de
emergencia? Es un punto que tampoco ha detallado el titular de la Secretaría de
Marina, Vidal Francisco Soberón Sanz. 3.- Todo este embrollo
arrojó una respuesta política. Y se midió de
cuando menos dos formas: A) Con el llamado que
desde la Federación se hizo al gobernador Héctor Astudillo Flores. Apenas el
pasado miércoles. Se entiende que el secretario de Gobernación, Miguel Ángel
Osorio Chong, lo citó por las presiones que desde la propia
PGR se habían incrementado hacia la Segob. Y por otro lado, la propia
determinación que tomó a título personal el
mandatario estatal, en el sentido de declarar la alerta de
género, sin esperar el dictamen que
la propia dependencia federal emitiría. B) La inesperada
visita del ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer y su fiel cancerbero, Héctor
Vicario Castrejón, a René Juárez Cisneros, titular de la subsecretaría de
Gobierno de la Segob. Lo cierto es que la emboscada contra los agentes de la
PGR en La Gavia, estaría arrojando no solo la eventual
renuncia de Pedro Almazán Cervantes, a la SSP; sino fortaleciendo las
alianzas internas tricolores, ante la evidente vulnerabilidad política del
actual mandatario estatal.
HOJEADAS DE PÁGINAS…La
alcaldía priísta de Taxco, presidida por Omar Jalil Flores Majul, también entró
en una vertiente deamplio desgaste, pese a las intenciones de dicho
personaje por empujar su reelección. Pero la violencia
y la corrupciónimparable, lo pegan contra el piso. Y por ese lado
llegaría eventualmente, la alternancia partidista en dicha comuna.