José Antonio Lavín Reyna
“La vida no es un problema a resolver, sino una realidad a ser
experimentada”: Soren Kierkegaard
El libro de los porqués.
El comentarista Francisco Jaime Navarro, hace referencia de todas las
preguntas contenidas en El libro de los porqués las cuáles formularon niños de
todo el mundo, que dirigieron sus cuestiones a la columna ¿How Come? del
Newsday’s, periódico de Long Island, Nueva York. Dicha columna se empezó a
publicar en 1897 a cargo de Kathy Wollard y poco a poco fue ampliando su área
de distribución hasta conseguir llegar a todo el mundo. En 1993 se publicó el
primer libro recopilatorio y las preguntas y respuestas están agrupadas
básicamente sobre, la turbulenta Tierra, el safari y el cuerpo humano.
Con respuestas sencillas y amenas y salpicadas de datos científicos el
lenguaje y su lectura son agradables y adecuada para niños y adultos que se
sientan azuzados por la curiosidad.
En él se da respuesta a cuestiones tales como: ¿El aire pesa? ¿Cómo se
formaron los desiertos? ¿Cómo se origina la niebla? ¿Por qué comen lana las
polillas? ¿Por qué tienen las orejas tan grandes los elefantes? ¿Cómo ronronean
los gatos? ¿Por qué sangra la nariz? ¿Por qué nos salen verrugas? ¿Por qué nos
alivia la comezón si nos rascarnos? Por qué las jirafas tienen el cuello largo?
¿Cuál es la causa del hipo? ¿Cómo hacen la miel las abejas? ¿Por qué encanece
el pelo? ¿Cómo se fabrica el chocolate? ¿Por qué brillan las luciérnagas? ¿Por
qué nos silban los oídos? ¿Cómo se forman las piedras preciosas y de dónde
procede su color? Las más interesantes preguntas -esas que todos nos hemos
hecho alguna vez- sobre el mundo, sus pobladores y la manera en que éstos lo
modifican, encuentran en este fascinante libro respuestas rigurosas, sencillas
y amenas. Recientemente apareció la segunda parte de ese libro y todas las
preguntas que contiene las formularon niños de todo el mundo por correo o
e-mail a la columna ¿How Come?, todas ellas contribuyeron a esta segunda parte,
en donde se cubre un amplio espectro de cuestiones científicas sobre el mundo
animal, incluido, por supuesto, el hombre, junto con las construcciones y
artefactos que componen el mundo.
En México, no sería mala idea, realizar un interesante ejercicio de
política económica y social, a través de recabar por correo electrónico
respuestas a preguntas como: ¿Por qué no se pueden despedir a los trabajadores
sindicalizados incompetentes y corruptos?, ¿Por qué no se puede investigar a
Gobernadores o alcaldes en funciones cuando hay indicios de abuso de autoridad
o corrupción y sólo lo hacen cuando ya terminan su periodo? ¿Por qué para
aspirar a ser diputado no se les exige una carrera universitaria terminada?
¿Por qué Derechos Humanos defiende a los manifestantes, ladrones y saqueadores
como si fueran sus hijos? ¿Por qué los regidores y diputados tienen recursos
para hacer labor social sin estar facultados para ello? ¿Por qué a los líderes
sindicales se les permite hacer tantas tropelías en contra de sus
sindicalizados y en contra de la ciudad y no se hace nada? ¿Por qué no hay un
transporte público digno en las ciudades del país? ¿Por qué las calles de casi
todas las ciudades del país están destrozadas? ¿Por qué hay gente inocente en
la cárcel? ¿Por qué existen tantos basureros clandestinos en las ciudades, lo
que las tiene hechas un asco? ¿Por qué circulan autos sin placas o placas
caducadas y no son detenidos y mucho menos multados? ¿Por qué se permiten las
extorsiones de los agentes de Tránsito?
Lo más interesante sería recabar respuestas rigurosas en su metodología
y presentarlas de manera sencilla y amena, quizás se logre hacer conciencia de
la grave problemática de los que nos gobiernan.
Algo Más…
Los antiguos romanos usaban mármoles en sus construcciones y cuando
algún mármol tenía grietas, éstas se tapaban o disimulaban con cera. Un buen
mármol, una pieza perfecta, no tenía grietas o fisuras y estaba pues,
“sin-cera”. De ahí nos viene la palabra sinceridad. Somos sinceros si no
ocultamos nada, si somos lo que se ve, tal como somos, entonces no somos
hipócritas.
El Papa Francisco advirtió contra los hipócritas y llamó a estar
vigilantes, pues “el hipócrita puede destruir una comunidad”. Señaló que Jesús
llama hipócritas a los que “enseñaban una cosa, pero luego pensaban otra”. Por
el contrario, “la hipocresía no es el lenguaje de Jesús. La hipocresía no es el
lenguaje de los cristianos”.
Los hipócritas siempre son aduladores. La hipocresía lleva consigo el
encubrirse para engañar. Se quiere dar la apariencia de bondad cuando en
realidad no la hay.
No es casualidad que el demonio haya sido representado en la Biblia por
la serpiente. Como se sabe, tiene una lengua bífida; es decir, termina en dos
ramificaciones. Por lo que se le atribuye tener doble cara, representando a la
mentira, la cual es un engaño. Por ello el Señor nos animó a que “vuestro
lenguaje sea ‘sí, sí’, o ‘no, no’.
En nuestro país la clásica política es experta en la hipocresía, su
arma predilecta en busca de obtener votos a cambio de falsas promesas, juegan
con la carencia de empleos dignos que le permitan a la población tener un mejor
nivel de vida. Luego de ello, realizan declaraciones torpes como la del Mazo:
#ganamos los mexiquenses, cuando los números indican que el 68% de la población
que participó en las elecciones no votó por su candidatura, por lo tanto, ganó
debido al programa clientelar del PRI.
En Iguala, ninguno de los electos por votación directa e indirecta,
presentó su declaración 3x3. Ninguno. Vaya, ni la regidora de MORENA, ninguno
renunció al pago a asistentes que les ayudan a hacer nada, ninguno de los que
cobran en la SEP, SALUD y otras dependencias gubernamentales renunció a ese
salario, en virtud de que no cumplen con sus labores. Tenemos un gobierno
totalmente opaco que goza del dinero público en detrimento de los ciudadanos
que los eligieron.
CCCXVIII.- Si conociéramos cuánto cobran Juan, Pedro, Luis, Pablo de
los Palotes y demás, así como las funciones que realizan, podríamos ver los
ciudadanos el desperdicio del dinero que podría ser utilizado en mejorar los
servicios de recolección de basura, de vehículos para bomberos, en sustitución
de líneas destrozadas de agua potable o drenaje sanitario, pero la opacidad que
viene desde el alcalde nos prohíbe conocer estos datos que por Ley deberían
estar en el Portal de Transparencia.
Por cierto, cuando un tubo de agua está roto, a los pocos días se nota
el desperfecto: brota el agua a la superficie o se hace un hoyo, por lo tanto
la excusa del estado de la tubería en la falta de agua en las calles del sur
poniente de la ciudad, no es válida.
Hasta la vista.