Noé Mondragón Norato
Guerra mediática contra Evodio, por resultados
El golpeteo político se
entiende. Está en juego la alcaldía más importante de la entidad para la
elección de julio de 2018. Y hay actores políticos que quieren regresar
a ella pese a sus bochornosos y sonados escándalos. Uno
de ellos, el más visible quizás, es el ex edil de Acapulco y aliado
político coyuntural del actual gobernador Héctor Astudillo Flores. Se
trata del priísta, Manuel Añorve Baños, un personaje cuyo capital político se
ensanchó con el arribo de Manlio Fabio Beltrones Rivera –su
padrino político-, a la dirigencia nacional del PRI. Y comenzó a reducirse
significativamente a partir de su renuncia a la misma
y su posterior ostracismo político. De ahí se entiende lo
demás.
EVODIO: BLANCO POLÍTICO.- En su reciente visita al puerto de Acapulco, el
titular de la Secretaría de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, reconoció
que la violencia había disminuido significativamente en Acapulco, y
esto se había traducido en una mayor afluenciaturística. Pero
algunos priístas como Manuel Añorve, lo entendieron como “línea política” desde
la Federación, para convertirlo en blanco político. Y
también sus demás adversarios –que igual buscan meterse a la repesca por
la alcaldía porteña-, se unieron a este coro. Se lee así: 1.- Una calificación
positiva por parte de la Federación priísta, para un alcalde
perredista que la gobierna, derivó en nerviosismo ypreocupación para
los demás actores que la persiguen. Sobre todo, porque esa evaluación refuerza
las aspiraciones políticas del perredista Evodio Velázquez
Aguirre, quien busca y le apuesta justamente, a la reelección
en el cargo que detenta, la cual y de acuerdo a la Reforma
Política de 2014, se hará efectiva a partir de la
elección de julio de 2018 en diputaciones
federales, locales y alcaldías. Esta Reforma ya fue aprobada por la
anterior 60 legislatura local de Guerrero. 2.- Uno de los
más afectados por la postura de Osorio Chong, fue justamente el ex edil
tricolor, Manuel Añorve Baños. Le caló sobre todo, que
el edil perredista, como parte de su gestión encaminada a promover el turismo
internacional, hermanara las ciudades de Cartagena de Indias,
Colombia y Acapulco. Ya antes, Evodio había logrado acuerdos en Miami, Florida, con
empresas navieras con el fin de recuperar el turismo
de cruceros, perdido justamente, desde la administración municipal añorvista. Es
decir, como alcalde opositor está dando resultados. Y
cuando eso ocurre, el celo político crece. De
manera natural. Explica los ataques sistemáticos de Añorve -y de otros actores
como el diputado local del MC, Ricardo Mejía Berdeja-, quien a través de ellos
busca regresar a la alcaldía impulsando a su esposa, la
diputada federal Julieta Fernández Márquez, como candidata del PRI a la
alcaldía de Acapulco. El punto es que Manuel Añorve ya tuvo su oportunidad como
alcalde. Y fracasó rotundamente. ¿Quién asegura que su esposa
o alguien de su grupo político harían la diferencia? 3.- El
secretario de Fomento Turístico, Ernesto Rodríguez Escalona, no aplica
ninguna estrategia visible ni rentable, para atraer el
turismo nacional e internacional. Por supuesto, a este personaje ni el
gobernador Héctor Astudillo –quien lo acusó tras su derrota en la elección de
2005, de operar una “traición silenciosa” en
su contra-, ni el ex edil Manuel Añorve, le exigen
resultados. Tampoco le arman una visible guerra sucia mediática. A
él, como a muchos otros priístas mediocres e incapaces, se
le perdona todo. Pero Evodio los trae de cabeza. Ese
es el punto.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Plausible, razonable y entendible, es la demanda del
rector de la UAGro, Javier Saldaña Almazán, en el sentido de exigir la
presencia permanente del Ejército en el campus universitario
de Chilpancingo, ante el irrefrenable clima de violencia e
inseguridad que afecta desde hace mucho tiempo, a toda la comunidad
universitaria. Lo único que falta, es voluntad política para darle
cauce a dicha petición.