Con el propósito
de orar y cantar por la paz, el sábado próximo se presentará por segunda
ocasión el Concierto de talla internacional "Cielo abierto" en
Iguala. (Foto: Mario Rodríguez).
Mario Rodríguez Jaimes
El concierto católico "Cielo Abierto" se presentará en Iguala
por segunda ocasión porque las cosas las pone Dios. Junto al concierto haremos
oración por la paz que es muy importante porque aún hay cosas muy turbias como
el tema de los 43 normalistas desaparecidos. Aquí está la llaga. Aquí está
el dolor. La gente vive situaciones difíciles.
En conferencia de prensa, para anunciar dicho concierto a presentarse
el próximo sábado en esta ciudad, el Presbítero José Alberto Alarcón Mota
subrayó que este evento se realizará por segunda ocasión en esta ciudad por
obra de Dios, “porque las cosas están muy difíciles y es necesario orar por la
paz”.
Señaló haber "cosas muy turbias como la violencia y el tráfico de
drogas. Iguala tiene entradas de la Sierra, de la Tierra Caliente e incluso de
Morelos que la hacen punto estratégico importancia que se refleja en la falta
de paz en las familias. El objetivo principal es orar por la paz que buscamos
por todos lados y en diferentes trincheras. Todos queremos vivir en paz. Los
mismos delincuentes quieren vivir en paz, por eso se andan matando entre
ellos", expuso.
Cielo Abierto, con 7 años de existencia ha visitado casi todos los
estados de la República Mexicana y 70 ciudades en 12 países de América Latina y
los Estados Unidos, en alrededor de 150 conciertos ha concentrado a poco más de
un millón 300 mil almas que buscan la paz a través de la oración y la
música.
Por intervención del Obispo y la Coordinación de los párrocos de
Iguala, habrá de presentarse por segunda ocasión el próximo sábado 29 de abril
a partir de las 6 de la tarde en las instalaciones del “Teatro del pueblo” al
interior del casco de la Feria a la Bandera.
Cabe mencionar que, a pesar de la distribución de boletos, habrá acceso
gratuito a todos los que deseen participar en este evento de oración y canto
por la paz, sin distingo alguno de religión, “porque Dios con diferentes
nombres es el mismo”.