Tribuna Pública
Francisco Javier Copeño Castro
En el mes de marzo del año pasado, se convocó a una mesa de trabajo con
las autoridades municipales encabezadas por entonces presidente municipal
Esteban Albarrán Mendoza, con la finalidad de presentar propuestas y alternativas
de solución al congestionamiento vial en calles adyacentes a al Mercado
Municipal “Gral. Adrián Castrejón”, ahí estuvieron los representantes de los
transportistas y representantes de los locatarios de dicho centro de abasto
popular, mismos que presentaron algunas propuestas, sin embargo desde esa fecha
hasta hoy, lo que se ha visto es que los transportistas solo buscaban que se
les beneficiara con lo que ellos propusieron al lograr imponer una base de
taxis en la calle de Nabor Ojeda misma que no ha venido a solucionar el
congestionamiento vial que se forma en este sector de la ciudad, y a pesar de
que hicieron el compromiso de que en breve se haría una prueba con la propuesta
de los locatarios, esto no se ha llevado a cabo por la afectación de los
concesionarios del transporte, porque en efecto, sí afectaba a ellos la
propuesta de los comerciantes, pero sin embargo, se beneficiaba a la mayoría de
la ciudadanía. Hoy a cerca de un año de eso, los expertos en imagen urbana de
la Facultad de Arquitectura de la UNAM, vienen a decir lo que se expuso en esa
mesa de trabajo por parte de los representantes de los locatarios, algo de lo
cual tienen copias tanto las autoridades municipales de tránsito y vialidad, así
como la Secretaría de Obras Públicas, las autoridades de transportes en Iguala
que encabeza el Delegado Jesús Munive Juárez, los mismos transportistas a
través de la Coordinadora, donde los locatarios les mencionaron que si se
quería realmente evitar el congestionamiento de que se hace en las
inmediaciones del Mercado Municipal “Gral. Adrián Castrejón” se deberían hacer
cambios de rutas del servicio público de las combis. Ahí tanto a los transportistas
como a las autoridades se les presentó una propuesta que a la fecha se ha
ignorado, lo cierto es que al tener un Delegado que proviene de los
transportistas y que no ve el interés general de la ciudadanía y solo los
intereses de los transportistas no lo pueden llevar a cabo. Hoy los locatarios
que hicieron la propuesta están contentos, porque a pesar de que dudan que
hagan caso a las recomendaciones de los expertos en imagen urbana de la
Facultad de Arquitectura de la UNAM, la satisfacción que les queda es que ellos
ya lo habían mencionado antes. Y como decíamos al principio los transportistas
siempre quieren hacer su voluntad, y mientras no entiendan que los cambios aunque
duros traen beneficios, siempre van a querer hacer que las autoridades se
sometan a lo que ellos digan. Las leyes están bien hechas, pero somos nosotros
quienes siempre queremos tener la razón aun y cuando lo que hacemos no
beneficie a la mayoría. El trabajador del volante no cuenta, los líderes del transporte
público son los que hacen lo que les viene en gana, claro está, en contubernio
con el Delegado de Transportes en turno y si lo duda, nada más basta echarle
una recordadita al Delegado de Transportes que cuando se vino el alza al
pasaje, por cada papeleta se tuvo que pagar $150.00 (Ciento cincuenta pesos)
por cada una de ellas y en aquel entonces se mencionó que era un gran negocio
de la Delegación de Transportes en la Zona Norte porque representaba el ingreso
de más de 2,500 unidades del transporte del servicio público, algo que generaba
una ganancia de más de 375,000 pesos por concepto de expedición de dicha papeleta.
Lo que obligó a la Dirección Técnica de Transportes en el estado a decir que la
expedición de dicho documento era gratuita, por lo que no le quedó otra al
Delegado a decir que quienes estaban cobrando dicho papel eran los líderes;
total que nada más se echaron la bolita uno a otro y nadie sabe, nadie supo. Lo
cierto es que dudamos hagan caso a las recomendaciones que les dejan los
expertos en imagen urbana de la Facultad de la Universidad Autónoma de México
para que cambien las rutas del transporte público, porque no quieren desviarse
ni una calle y quieren pasar a pesar del tráfico que se genera por el Mercado y
el centro de la ciudad a la de producto de gallina, argumentando porque creen
que con ello, siempre van a recoger pasaje, algo falso porque cuando se crean nuevas
rutas siempre van a tener pasaje, lo que pasa es que ya se hizo costumbre hacer
su santa voluntad que tienen miedo a experimentar nuevas experiencias sin saber
si van a ser exitosas y entendemos claramente porque no aceptaron los
transportistas los cambios que proponen los locatarios, porque eso haría que se
saliera de sus rutas y aunque con ello se beneficiaba a la ciudadanía, se lesionaban
los intereses de ellos. ¡Así de fácil! ¡Hasta la próxima y salud!