¿Desprecio a Iguala?

¿Desprecio a Iguala?
Guillermo MEJÍA Pita

Primero que el día 17. Después que el 18. Lo cierto es que ni uno ni otro día llegó. La agenda estaba preparada para que el sábado 18 de febrero, el gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo asistiera como invitado de honor a una de las máximas fiestas de los igualtecos: los festejos a la Bandera de México.
Oh desilusión! Simplemente fue cancelada la visita de Astudillo a Iguala, sin que hasta la vez alguien explique el motivo. Aunque algunos suspicaces sueltan la posible causa: “..ya no venga a Iguala gobernador...” refiriéndose a los gritos destemplados de una regidora el pasado 30 de enero.
Indiscutiblemente que esto último no fue el motivo de la cancelación de la gira de trabajo que realizaría Héctor Astudillo el pasado sábado 18 de febrero. Más bien, se entiende como una reprogramación para “el día grande”, 24 de febrero.
Por vía de mientras, la ausencia de Astudillo para inaugurar la Feria a la Bandera podría tomarse como un desprecio para los igualtecos, porque además debería inaugurar el monumento a los Héroes de la Independencia y la remodelación del estadio de futbol, así como entregar patrullas a la policía de la localidad, según la agenda establecida.
A todos estos eventos, como ya es costumbre, se realizó el “acarreo” de decenas de personas para atestiguar los actos y acompañar al gobernador Astudillo, quien simple y sencillamente dejó “plantados” a todos esos igualtecos que previamente fueron convocados, voluntariamente a fuerza.
O bien Héctor Astudillo anda dando bandazos o, en el peor de los casos, su inasistencia a la inauguración de los festejos a la Bandera es una clara muestra de su desprecio a Iguala y sus habitantes.

Aunque pensándolo mejor, podría ser cierto el comentario viperino de la vox populli, en el sentido de que la esposa de Astudillo está “celosa” por cierto romancete que se le conoce al gobernador en Iguala, motivo de la cancelación de sus visitas constantes a ésta localidad. ¡Ni que fuera para tanto!