LECTURA POLÍTICA
Noé Mondragón Norato
Los crímenes políticos de Astudillo
Si se mira bien, desde que tomó protesta como gobernante, el priísta
Héctor Astudillo Flores, acumula seis asesinatos políticos. En
promedio,uno por mes. La mayoría de esos funestos eventos llevan
impreso el sello del crimen organizado. Lo más lamentable es que hasta hoy, ninguno
de esos casos se ha resuelto. Porque la Fiscalía General
del Estado (FGE) se ha quedado enmudecida e inoperante. Basta con
asomarse a cada caso para entenderlo mejor.
SEIS FUNCIONARIOS
EJECUTADOS.- El recuento criminal
lo dice todo: funcionarios y políticos están a merced de la delincuencia
organizada. Porque pactan con alguna organización criminal. O
se mueren. El estado priísta no tiene estrategia alguna
para detener dicho escenario. La estadística no miente: 1.- El
regidor perredista de Obras Públicas de San Miguel Totolapan, Roberto García
García, fue asesinado el lunes 2 de noviembre de 2015 en la
comunidad de El Terrero. Sujetos armados lo sacaron de su vivienda y después lo
ejecutaron. Era cercano al polémicoedil de ese mismo partido,
Juan Mendoza Acosta. Su crimen nunca se resolvió. 2.- Dos días
después de ese evento criminal –el 4 de noviembre- el comisario de Polixtepec,
Joaquín Romero Ríos y su secretario Víctor González Luna, fueron asesinados en
una emboscada, en la sierra del municipio de Leonardo Bravo (Chichihualco). El
atentado se registró aproximadamente a 600 metros de una base de operaciones
que mantiene en el lugar, el Ejército Mexicano. En respuesta a este crimen,
comisarios de 40 pueblos cerraron el acceso a la zona de Filo Mayor para
demandar la búsqueda de los culpables. Nunca los encontraron. Fue un doble
crimen que se quedó impune. 3.- El lunes 7
de diciembre de 2015, fue ejecutado a unos 200 metros de las oficinas
del Ayuntamiento ubicadas atrás del Fuerte de San Diego, en la ex Zona Militar, el
director deRecursos Humanos del ayuntamiento perredista de Acapulco, Luis
Andrés Lara García. Su escolta, Raúl Parra Herrera, quien era policía tercero
de la Preventiva y asignado al cuidado del funcionario, también fue asesinado.
Ambos casos tampoco fueron aclarados. 4.- Hombres armados
irrumpieron en las oficinas de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del
Municipio de Acapulco (CAPAMA) en Ciudad Renacimiento, la mañana del martes 22
de marzo de este año, y atacaron a balazos al gerente
comercial, el perredista Arquímedes Guzmán Cisneros, quien falleció en
forma instantánea. El encargado del departamento de detección de tomas
clandestinas, Jorge Trujillo Acevedo, también quedó herido. Arquímedes
Guzmán fue el presidente del Comité Ejecutivo Municipal del PRD (2006-2008) y director
del parque Papagayo durante la administración del gobernador Ángel Aguirre
Rivero. Perteneció al Grupo Guerrero (GG), la tribu del
perredista David Jiménez Rumbo. El alcalde perredista Evodio Velázquez Aguirre
confirmó que las líneas de investigación seguidas por la FGE sobre el crimen de
su colaborador y las lesiones a otro funcionario municipal fueron “la
extorsión y el robo”. Pero hasta hoy no hay detenidos. Solo
especulaciones. 5.- La ex regidora del Partido
Verde Ecologista Mexicano (PVEM) en el municipio de Iguala, Esther
Olea Vargas, fue asesinada la tarde del pasado miércoles 30 de marzo, cuando se
desplazaba en una camioneta X-TRail blanca de modelo reciente, con su hija,
Daniela Román Orea, quien resultó herida en el ataque. Ni el edil priísta,
Esteban Albarrán Mendoza, ni la FGE, han dado luces sobre los móviles de
ese proditorio crimen que empaña notoriamente, la administración de Héctor
Astudillo. 6.- Finalmente, ayer jueves 21 de abril, fue
ejecutado el regidor de Medio Ambiente y Recursos Naturales
del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), en el municipio de
Tecpan de Galeana, Víctor Manuel Camacho Urióstegui. Su chofer, Oliverio Molina
Díaz, también fue asesinado. Junto a los cuerpos se encontró un mensaje
aparentemente escrito por sus agresores que decía:“esto les va a pasar a
todos los que coperen (sic) con los granados. Atte. Cartel Los Rodríguez. Ya
estamos aquí”. Los crímenes políticos le están pegando con
fuerza a la administración Astudillo. Y más, porque ninguno de ellos se
ha resuelto.