Columna

Desde la Redacción

Julio César Zubillaga Ríos

 

UNA GRAN PENA, dolor, rabia, indignación y muchos sentimientos más nos han causado la muerte de nuestro compañero Alfonso Solano Tierrablanca “El Canelo”, nuestro voceador “estrella”, cuya voz (audio del perifoneo) nos ganó infinidad de lectores y comentarios. Poncho fue asesinado arteramente a manos de dos cobardes y despiadados pistolerillos que se desplazaban en una moto color negra y que lo sorprendieron cuando hacía su trabajo en la colonia “Adolfo López Mateos” ante la vista de muchas personas que impotentes se acercaron después del ataque para intentar ayudar al popular voceador, quien en un esfuerzo supremo por salvar la vida alcanzó a llegar al Hospital, donde poco se pudo hacer ante las 4 impactos mortales que recibió en la cabeza… HOY, a esos dos cobardes criminales, a sus patrones, y a todos quienes han atentado contra la libertad de expresión que aquí ejercemos a costa de lo que cueste, les decimos que EL UNICO RESPONSABLE de lo que aquí se publica es un servidor, y que los voceadores sólo se ganan el sustento diario vendiendo El Diario de la Tarde, algo que ya no podrá hacer Poncho, que llevaba de esa manera la comida para su esposa e hijos…YA NOS ENTEVISTADOS con el fiscal regional y el Comandante de la Policía Ministerial exigiendo responsabilidad para realizar el trabajo por el cual les pagan. Ya se aportaron datos y pistas que deben servir para la captura de esos perros asesinos (con perdón a los canes), pero la rabia nos ha invadido por la forma de actuar y matar de estos sujetos que tarde que temprano recibirán lo que merecen… NO QUEDA MAS QUE PEDIR RESIGNACION a la familia agraviada, orar y pedir al Creador nos mande valor y entereza para poder soportar esta pérdida sólo material, porque los recuerdos y los compromisos habrán de continuar. En el firmamento ya observamos una luz más que seguramente nos iluminará en los momentos más difíciles como el que hoy sufrimos… EL CANELO debe estar seguro de que su familia no quedará sola y menos desamparada, porque quienes lo conocimos y de verdad lo apreciamos estaremos ahí para apoyarlos hasta donde nos alcance… NO ESTA DEMAS EXIGIR JUSTICIA, responsabilidad a las autoridades, todas, responsables de brindar la seguridad pública hoy inexistente en nuestro país, estado y muy lamentablemente en nuestro municipio y ciudad que habitamos… PESE A TODO, El Diario de la Tarde habrá de continuar como siempre, informando al momento de los hechos, de manera veraz y objetiva, al servicio del pueblo, aún cuando resulten afectados criminales de todo tipo…HOY LA SANGRE derramada por nuestro compañero es un aliciente más de lucha y responsabilidad…EN PAZ DESCANSE EL CANELO, sea por él y demás víctimas de la delincuencia cobarde, que debemos unirnos para alcanzar la justicia que hoy en día no ha logrado proporcionamos el gobierno en todos sus niveles.