LECTURA POLÍTICA

Lectura

Noé Mondragón Norato

El regreso político de Aguirre

 

Como en la elección del 30 de enero de 2011, el PRD necesita nuevamente del gobernador con licencia, Ángel Aguirre Rivero, para encarar con aplomo y firmeza, la elección del próximo 7 de junio que renovará el gobierno estatal, un evento anticipado como bastante complicado para ese partido que, con los hechos funestos de Iguala, no solo evidenció sus debacles internas, sino el agudo grado de penetración del crimen organizado en alcaldías, diputaciones federales y locales y hasta cargos públicos ejercidos por notables personajes en el gabinete estatal. El eventual regreso político del ex gobernador perredista con licencia se medirá de varias formas.

TRIBUS: NECESITAR DE AGUIRRE.- Desde donde se le vea, el ex mandatario estatal mantiene cierta plusvalía política, pues al no existir ninguna investigación que lo señale como responsable de la desaparición forzada contra los 43 normalistas de Ayotzinapa, mantiene vigentes sus derechos políticos. Pero su regreso ya preocupa a más de uno. Por varias razones: 1.-En la tribu Nueva Izquierda (NI) o los chuchos, sobra el desconcierto y la confusión. En un momento de crisis política terminal, apelan a los amarres políticos con quien sea con tal de mantener en su poder el gobierno estatal. Pero la parte fundamental se relaciona con un hecho que los perturba: la tribu Izquierda Progresista de Guerrero (IPG), del ex gobernador Aguirre, ganó la mayoría de los Consejeros estatales durante la elección interna perredista del pasado 7 de septiembre. En ese carril, sería imprudente y hasta suicida que los chuchos designaran al candidato a gobernador por el PRD, tomando como base el posicionamiento en las encuestas de algunos aspirantes, pero sin tomar en cuenta ni evaluar la fuerza política real de IPG. 2.-En algunas tribus perredistas existe cierta preocupación debido a una situación precisa: el grupo político del ex gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, estaría en la senda de empujar con fuerza al senador perredista Armando Ríos, con el fin de que sea designado candidato por ese partido a gobernador. El problema sin embargo, es que ha dicho legislador se le ha exhibido como un aliado político hasta el grado de admitir “acompañar casa por casa”, al ex edil de Iguala, José Luis Abarca Velázquez. Una encuesta carece de un parámetro confiable como para determinar que ese hecho no le afectará sustancialmente a Ríos, para ganar hipotéticamente y en su eventual condición de candidato, esa elección. Eso por un lado. Por el otro, preocupa a mucha de la militancia del partido del sol azteca, la marcada insensibilidad de dicho legislador. Temen que su estilo poco ortodoxo y elitista de entender la dinámica del poder, termine excluyéndolas de su reparto. Igual o peor respecto de cuando gobernó Zeferino.3.-El personaje que conoce las entrañas del monstruo priísta es Ángel Aguirre. Si se mira bien, antes de la elección de 2011, el grupo zeferinista ya tenía proyectado empujar como su candidato a gobernador al entonces diputado federal, Armando Ríos. Pero las señales políticas eran desalentadoras. Tras el crimen irresuelto y groseramente manoseado de Armando Chavarría Barrera, la crisis perredista tocaba fuerte como para que dicho partido perdiera el gobierno estatal. Y los cuadros políticos y operativos del gobernador Zeferino Torreblanca, no mostraron nunca, la forma en que podían revertir los escenarios electorales de desastre. Fue ahí cuando apareció Aguirre. Causó un cisma político en el PRI. Pero logró alzarse con el triunfo electoral en la elección de gobernador. Hoy, la historia política guerrerense se repite en dos pistas: el PRD redita su crisis política que lo instala en la antesala de perder la elección del 7 de junio próximo. Con la única diferencia de que se observa más descompuesta que la de 2011. Y puso de frente otra vez, al grupo zeferinista con el aguirrista, en la competencia por la candidatura a gobernador en el PRD. El punto sin embargo, es que como en enero de 2011, las tribus perredistas necesitan otra vez de los servicios políticos de Aguirre. Y éste último regresará a regar sus parcelas de poder. Es obvio que no se las puede dejar libremente a otros actores con el fin de que exploten lo que él sembró. En el peor de los casos, a sus adversarios políticos. De ahí se entiende que hasta el dirigente estatal del PRD, Celestino Cesáreo Guzmán, festine el eventual regreso político de Ángel Aguirre.

HOJEADAS DE PÁGINAS…En un excesivo uso de la fuerza y la intolerancia, presuntos normalistas de Ayotzinapa cubiertos del rostro, secuestraron la caseta de cobro de La Venta en Acapulco. Y contrario al descuento en el cobro a los automovilistas y turistas ordenado por el gobierno federal –que es de 25 pesos en ese punto-, los enardecidos radicales se empeñaron en cobrar mediante insultos y amenazas, cincuenta pesos parejo a todos los paseantes. Y así, lejos de sembrar solidaridad ciudadana, le apuestan a la crispación y a la denostación de su movimiento. Porque nadie sabe qué hacen con el dinerorecabado. En arca abierta, hasta el más justo peca.

dragonato@hotmail.com