Columna: PATADAS BAJO LA MESA

 

El Diario de la TardePATADAS BAJO LA MESA

Moisés Ocampo Román

 

Otra vez la francesita Florence Cassez, que no se conformó con el gran amor de Vallarta, su novio mexicano, quien la indujo al bajo mundo del secuestro, y ella le agarró el gusto, al grado tal que ella se encargaba de torturar y golpear a los secuestrados.

El show que armó la PGR fue lo que dio al traste con su reclusión en la cárcel. El ministerio público tuvo inconsistencias en el caso y la suprema corte la liberó en una decisión de 3 x 2. Pero realmente sabemos que el Presidente Sarkozy exigió al gobierno de Felipe Calderón que la soltara, so pena de acabar las relaciones bilaterales entre los dos países.

Ahora la francesa va a demandar a Felipe Calderón, Daniel Cabeza de Vaca, ex procurador general de la república; al secretario de seguridad pública de ese entonces Genaro Luna, a los periodistas Loret de Mola y Pablo Reinah. A Televisa con todo y Chabelo, a la Bruja del 71 y a su chingada madre por “daño moral irreversible”. ¡Mocos!

¿Y los secuestrados? Aquellos que Florence torturó física y moralmente. Ellos creyeron en la justicia mexicana NO en la política de gobierno. En efecto, Florence Cassez fue liberada NO por NO ser culpable, sino por gustos de la política internacional. Los señalamientos de los incautados son dolorosos, sin duda alguna señalan que la Cassez los torturaba psicológica y físicamente, y fue cómplice en 46 secuestros junto con su pareja Israel Vallarta, quien la exculpó y la extraña en la cárcel.

Ahora ella pretende 36 millones de pesos por reparación del daño moral. ¡Qué poca madre! Ella y todos sabemos que fue liberada siendo culpable, al contrario debería de ser agradecida con México que le dio chorizo, casa y diversión, pero su diversión era cortar orejas y secuestrar. Mejor le paro. Estoy siendo muy pelado, pero estoy “encabronado”.