Tribuna Pública
Francisco Javier Copeño Castro
Eran las 13:30 horas del día 22 de octubre, en el Mercado Municipal “Gral. Adrián Castrejón”, el pánico y la psicosis se apoderaron de los locatarios de dicho centro de abasto, cuando se rumoró que quienes hacían desmanes destruyendo e incendiando el palacio municipal de Iguala, iban a la central de autobuses Estrella Blanca y temiendo lo peor empezaron a cerrar sus locales comerciales y hasta los accesos de dicho centro comercial.
Por todos lados se veía a comerciantes asustados y con la incertidumbre reflejada en el rostro, al no saber lo que estaba pasando y aunque había voces que les decían que no pasaba nada y que todo era producto de la rumorología, que siguieran con sus actividades normales, la mayoría no hizo caso y siguió guardando su mercancía para retirarse a sus casas.
Loa accesos principales del Mercado Municipal “Gral. Adrián Castrejón” fueron cerrados por inspectores de dicho centro de abasto, siguiendo las indicaciones del administrador licenciado Jorge Luis Villanueva Palacios, quienes dijeron que lo hizo como medida de protección a los comerciantes en general y público consumidor.
Finalmente todos cerraron sus locales y se retiraron con un día de pérdidas en sus ganancias, y con un gran susto, gracias al rumor de gente que con esta ya son tres ocasiones que sucede. La primera con el rumor de que los maestros iban para Altamirano pero nunca imaginaron que se referían a la ciudad de Tierra Caliente, otra más cuando hace un poco más un año también destrozaron el palacio municipal y se dijo que se dirigían a la casa del alcalde José Luis Abarca que está cerca del mercado y en esta ocasión que dijeron que estaban en la central, pero era la Central de abastos. ¡Caray! Y todo por dejarse llevar por los rumores.