Pretendemos impulsar una
cultura de la legalidad: PFP
Roberto A. Márquez Añorve
En su carácter de Inspector Jefe de la Policía Federal Preventiva comisionado en Iguala, Roberto Hernández Rangel rechazó tajantemente malos tratos a los elementos concentrados en la capacitación y acreditación en el estado de Tlaxcala, argumentando que todo ha sido desinformación a través de mensajes de celulares por parte de elementos que resienten el cambio tanto de hábitos (sedentarismo), alimenticios e incluso el clima mucho muy diferente al de Iguala, y que en cuanto a los 10 elementos separados ayer de la concentración, dijo que se trató de presentaciones a declarar; más no se trata de desaparición forzada o represalias que llegará a todos como se ha dicho.
En entrevista para EDDLT, indicó que una vez que entre en funciones el Mando Unico desean una Policía objetiva, sin señalamientos de abusos y de actos de corrupción. "Una Policía honesta, responsable, justa y que motive confianza entre la población", destacó.
En torno a las denuncias en contra de algunos elementos de la PFP por presuntos abusos y las posibles sanciones que pudieran presentarse, dijo que "esto fue una farsa de las quejas en contra de sus elementos comprobado ante las autoridades ministeriales. Todo es parte de la resistencia a una cultura de la legalidad, porque personalmente he encabezado recorridos y operativos".
Platicó que el pasado domingo a las 05:00 horas en las calles Constitución y Guerrero un Chevy color gris chocó y causó algunos daños, por lo que se solicitó la presencia de una grúa. “El resto fue una falsedad comprobada ante la autoridad ministerial", reiteró.
Apuntó que todo obedece a una resistencia al impulso a la cultura de la legalidad. "Nosotros no levantamos infracciones; ponemos a los infractores a disposición de un juez calificador o ministerio público si se cometió algún delito".
Destacó que Iguala no es una ciudad donde predomina la anarquía, "son palabras mayores", más bien por falta de costumbre no hay cultura de legalidad. Por eso muchos no usan casco al conducir motocicletas, se estacionan en doble y triple fila, no respetan espacios para discapacitados, entre otras cosas. "Venimos a enseñar esa cultura de legalidad", insistiendo que va a haber resistencia al cambio por parte de algunos, pero confía en que pronto se integren “y los buenos hábitos se vuelvan costumbre", puntualizó.