policiaca

Comisarios piden la intervención de autoridades

Denuncian policías rurales de

Cocula agresión de militares

 

Agencias

 

Los Comisarios de Nuevo Balsas, La Fundición, El Limón y Atzcala forman un solo pueblo con más de 250 habitantes armados para reforzar la seguridad de sus pueblos y sus habitantes.

Así lo dio a conocer el Comisario de Nuevo Balsas, Juan Salgado Delgado; de La Fundición, Francisco Sotelo Soto; de El Limón, Nabor Cervantes Román, y de Atzcala, Ángel Morales Román, quienes destacaron la unión de los cuatro pueblos para reforzar la seguridad de sus habitantes y para dar conocer las constantes agresiones sufridas por parte de elementos castrenses.

Relataron que hace aproximadamente un año sufrían de secuestros, extorsiones, pago de cuotas, levantones y asesinatos, por lo que formaron la Policía Rural integrada por más de 250 hombres armados dispuestos a morir por defender a sus pueblos.

Hicieron un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno para que sean apoyados con más seguridad, pero que respeten a la Policía Comunitaria, ya que han sido víctimas de agresiones por parte de elementos del Ejército Mexicano.

Mencionaron que el pasado lunes alrededor de las 9 de mañana, dos policías comunitarios del poblado de Atzcala, de nombres Donaciano Román Peralta y Daniel Martínez Rebolledo, viajaban en taxi rumbo a su pueblo, Atzcala, cuando fueron interceptados por dos camionetas de elementos castrenses, los cuales los bajaron y empezaron a golpear a pesar de que se identificaron como policías rurales.

Posteriormente, alrededor de las 11 de la mañana de ese mismo lunes 1 de septiembre, elementos del Ejército interceptaron una camioneta de la Policía Rural de Atzcala en donde viajaban 4 elementos de nombres Gregorio Cuevas Morales, José Isabel Román Cerón, Alberto Rebolledo Cuevas y Alejandro Peralta Rebolledo.

Los militares les ordenaron que entregaran sus armas, los sentaron en el piso y uno a uno los fueron llevando a un barranco en donde los interrogaban y golpeaban; también los amenazaban con ser ejecutados, degollados y que les sembrarían armas para meterlos presos.

Los seis policías comunitarios después de ser agredidos fueron al Palacio Municipal de Cocula para levantar una acta de lo ocurrido, además de presentar formal denuncia en el ministerio público por los delitos de abuso de autoridad y lesiones.

Por último, los cuatro comisarios pidieron al gobierno apoyo con elementos de seguridad pública de los tres niveles de gobierno, pero que sean respetados y puedan colaborar en conjunto con los elementos de la Policía Rural y habitantes de las comunidades.