PATADAS BAJO LA MESA

PATADAS BAJO LA MESA

Moisés Ocampo Román

EL GRUPO JACALITO

 

Debo advertir que pertenezco al “Grupo Jacalito”. Soy el único NO priista que asiste al desayuno mensual, precisamente en el restaurante “Jacalito” de mi amigo Carlos Mejía.

Hace unos días en este Diario se público, más bien Roberto Añorve publicó que: “Blindan El Jacalito”, refiriéndose a que NO podía cualquiera desayunar ahí sin pagar. Y bien NO me veo obligado a contestar, pero…umm…quiero hacer algunas apreciaciones a pesar que el saco de gorrón NO me queda porque siempre he acostumbrado a pagar. Sin embargo, quiero contarles lo siguiente: El Grupo “JACA” empezó gracias al doctor Raymundo Román Noverón, quien junto con Carlos Mejía empezaron por comprar una tele de plasma para ver los partidos de futbol, que finalmente no se ha ocupado por el ahora grupo en mención. Y es verdad que, pese a que la mayoría han sido y son políticos o funcionarios públicos, el grupo NO es político; es puro cotorreo ameno, que se habla de todo y de nada.

El grupo empezó a crecer. Muchos que empezaron a ir a desayunar y ya no van. Otros se han quedado por el ambiente que arman José Luis Román, Raymundo Román, el notario Francisco Román, “don Chico” Mejía, “El Capi” Serrano, Sergio Fajardo, “ Tito” Mota, Tavo Mendiola, Ulises  Pérez Calvo, y otros que se me escapan a la mente. El grupo ha crecido, y se han hecho reuniones con los aspirantes a la presidencia municipal del PRI. También con personajes de la política como: el General Arturo Cardona Marino, don Fernando Alonso, Cuauhtémoc Salgado y otros más, pero el afán no es otro que convivir.

Y de lo otro, que ha habido gorrones ¡siempre los hay! Pero en este caso son varios que van a tragar y no pagan. Y más, con todo respeto, del gremio del periodismo, y quien pierde es el dueño, porque no vive de la fama porque ya la tiene; ni vive del aire, entonces quien desayuna, tiene que pagar. Y también estoy seguro que nadie quiere una nota periodística; es solo un lugar con una mesa exclusiva para el Grupo “JACA”, y claro que es elitista, porque no es un grupo de lucro, ni social, ni político; es solo charlar, reír y comer rico en el JACALITO. Y ahora, de verdad, muy pocos periodistas sacan su dinero para pagar, creen que merecen que les tributen la comida, porque los pinches políticos los mal acostumbran. Por eso muchos de ellos les huyen como si fueran su casero. Pero repito, NO QUIEREN PUBLICIDAD, NADA DE DIFUSION. No mal interpreten. E hicieron muy bien en blindar esa mesa exclusiva de puros cuates. Finalmente no tiene nada de malo hacer grupos y desayunar, ni tiene nada de malo pagar lo que se tragan.

N. de R.- Con todo respeto mi apreciado Moy, aún cuando NO me viene ese saco de gorrón porque me gusta y acostumbro pagar, invitar y dejar propina, sí considero oportuno hacer las siguientes precisiones, en el entendido ese del que calla otorga. Para empezar, aquí no publica Roberto Añorve, ni Grisel Tapia, Enrique García o Moy Ocampo. Aquí el que publica y responde por lo publicado (con excepción de columnistas) es tu servidor como editor y propietario de El Diario de la Tarde. Y con respecto específico al caso “Jacalito”, el reportero en mención fue a cumplir su labor como tal, desconociendo tu servidor si paga o no paga lo que se traga, mencionando éste (reportero) la presencia de un tipo que obstruyó su labor, hecho que no apruebo en defensa de la dignidad del gremio al que pertenezco a mucha honra, aún cuales fuera la apreciación que se tiene del mismo (gremio), que no debe ser, espero, tan devaluada como la de los políticos en general. Por tanto, considero innecesaria la forma “pública” de cobrar “por adela” del propietario del restaurante (Carlitos Mejía alias El Diablo, a quien considero aunque no mi amigo sí mi conocido, hermano de mi amigo y compañero de estudios Gerardo), pues sería mejor le cobre específicamente a los gorrones que no pagan y le deben lo que tragan, y no generalice la cobranza incluyendo a quienes nada tienen que ver con esa relación de clientes-comerciante. Por lo demás mi apreciado Moy, apruebo el cotorreo ese que mencionas y que no necesita de reflectores. Saludos hermano!

 

Tu servidor y amigo Julio César Zubillaga Ríos.