NIÑOS CARNE DE CAÑON

NIÑOS CARNE DE CAÑON

Por: Carmelo Corripio Pineda “El Búho”

 

Rey le decía a Cobo: ____Pensaba mucho que ojalá mi papá fuera don Chebo___, ¿Por qué, le preguntó Cobo? “Porque tiene casa grande y bonita, tiene carros, no se emborracha ni les pega a sus hijos  y tiene mucha comida”___ En mi casa mis hermanos lloran de hambre. Por eso huí. Rey y Cobo viajaban en el último vagón de la BESTIA, sus padres alcohólicos y pobres eran una carga social irresponsable, no denunciaron la desaparición de sus hijos de 9 y 10 años, el bramido de la BESTIA devorando kilómetros dejaba a cada instante ríos y montañas, naturaleza viva, el paisaje lo recogía el corazón de los niños extasiados a través de las ventanillas.

La crisis humanitaria de los niños estalló en centro América, México y Estados Unidos. Ya no se podía ocultar más; se publicaban escenas desgarradoras. El niño de 11 años localizado muerto en el desierto de Arizona, con un pedazo de papel que apretaba en su mano derecha, inscrito un teléfono de quien lo recibiría en su casa en Estados Unidos: ____10 niños sorprendidos por la patrulla fronteriza en territorio yanqui, a media noche, mitad gorilas y mitad bull dogs alumbran sus caritas asustadas,  con lámparas potentes para buscar criminales, aun fríos de su corazón, los policías se desconcertaron, sabían que no había ningún mérito que se les diera a su trabajo de perseguidores de niños, el gobierno yanqui destinó campos de concentración, para inmediatamente deportarlos, el recurso que solicitó el presidente Obama al Congreso, era para cubrir los gastos de las deportaciones  a suelo Mexicano, culpando a nuestro gobierno del éxodo que transitaba por su frontera sur.

Los Organismos Internacionales de los derechos humanos intercedieron y la coerción humanitaria, obligo a los países de centro América, México y estados unidos, formular un plan de auxilio en favor de los niños abandonados en la frontera.

La violencia que sacude el país es estremecedora, el crimen organizado se va en contra de los grupos más vulnerables y escoge dentro de ellos a los niños, como negocio para comercializar sus órganos, para ofertarlos al mejor postor en el mercado negro; para la prostitución ofrece a pederastas, los utilizan para organizarlos en la mendicidad; como un nuevo concepto de esclavitud, contra el crimen y a favor de los niños ahí que levantar muchas voces para sensibilizar a la sociedad, es el México profundo, real y terrible que, como una vorágine nos devora a todos; a la sociedad se le ha informado de ese grupo infantil, en cine, en teatro, en prensa, etc, “como el pequeño chicago”, una obra en que un menor abandona su hogar por la pobreza de sus padres y es secuestrado, primero mutilado, y finalmente asesinado, fue una obra para niños que terminaron llorando.

Lidia Romero, Marco Antonio Silva, Laura Rocha, Francisco iliescas, Benito González, han publicado en diarios de Mazatlán, Jalisco y Distrito Federal, sucesos espeluznantes de niños mexicanos y que no es posible que nuestra sociedad no repare ni actué para restablecer el derecho de estos niños.

Rey y Cobo, tuvieron suerte al llegar a la frontera y penetran a territorio yanqui la patrulla fronteriza los devolvió inmediatamente a suelo mexicano y los dejo en Ygli Pax, de lado mexicano, a bordo de carretera, pasando la caseta una pareja les ofreció aventón, su ruta era saltillo, san Luis potosí, Querétaro y México donde radicaban, los niños sin tener ningún destino especifico aceptaron y en el trayecto contaron a los Pedraza su historia, escueta, simple una tragedia contada de forma natural porque ellos la vivían a diario y nosotros creemos que se vive en la mayor parte de los hogares mexicanos, la señora Pedraza se secaba sus lagrimas discretamente, su esposo se percato y paro la suburban en una gasolinera, ahí cenaron los cuatro el señor Pedraza era fabricante de tintas, sus hijos profesionistas Vivian independientes con sus familias, y los esposos Pedraza habitaban su casa  solos, en una zona exclusiva del distrito federal, les ofrecieron su casa, que vivieran con ellos, como sus hijos, con derechos y obligaciones reciprocas  que les ayudaran en la fábrica, en la casa después de sus ocupaciones escolares, como verdaderos hijos de familia, deslumbrados despertaron la primera noche en su nuevo hogar, llenos de felicidad como Rey había soñado constantemente que don chebo fuera su papa, como se había cumplido ese deseo profundo, creyó que Dios de verdad existe.

Al conocer esta historia de Rey y Cobo, saber la destructiva actividad del crimen organizado, conociendo la sociedad de las necesidades de los grupos  vulnerables y que se luche por resolver sus carencias, sabiendo que los vulnerables viven en un clima de incertidumbre que abruma y devora la vida cotidiana de todos en este país.

Se propone como programa:

1.- Censar a los niños de la calle y obligar a los ayuntamientos a formular programas de alimentación.

2.- Adoptar uno o más niños como obligación directa, alimentarlos educarlos, atender su salud, ropa y vivienda.

3.- Comprometerse aunque vivan en otra parte, vigilar su educación.

4.- Incorporarlos a la vida social de nuestra familia como si fuera un hijo, hermano etc.

5.- Brindarle afecto y solidaridad, sin menos cabo de su libertad.