Iguala

Secundado por dirigentes sindicales…

Se esconde funcionario ante la Prensa

 

Grisel Tapia Flores

Arturo Galinda Baza, director de “Servicios Públicos Municipales”.

 

El secretario de servicios públicos municipales, Arturo Galindo Baza, evidenció una vez más su repudio a la labor de los medios de comunicación, al evitar la presencia de reporteros que pretendían cubrir la entrevista que sostuvo con dirigentes sindicales que presuntamente abogarían por sus representados, víctimas de maltrato por parte del director de Limpia, Roberto González Sandoval. Como viles delincuentes, funcionario y líderes sindicales se escondieron ante la presencia de la Prensa. Sus motivos tendrán…

Derivado de que un grupo de trabajadoras del gobierno municipal que se desempeñan en el área de Limpia se concentraron en la oficina de servicios públicos para denunciar las anomalías de su director, Roberto González Sandoval, fueron recibidas por el titular de Servicios Públicos, Arturo Galindo Baza, quien minutos después de iniciada la reunión corrió a los representantes de los medios de comunicación, bajo el argumento  de que “es mi oficina, donde soy el titular y no pueden estar grabando”.

Las acciones de Galindo Baza no sólo ponen en entredicho la supuesta política pública de transparencia que mantiene el alcalde José Luis Abarca, de quien se sabe está en la disposición de mantener audiencias públicas en su gobierno, contrario a lo que ejerce su secretario de servicios municipales. 

Estas actitudes que caracterizan al funcionario en mención contra los reporteros de la fuente son continuas, cuando se le pide información sobre sus funciones, siempre responde de manera evasiva y sarcástica.

Ayer las trabajadoras de Limpia solicitaron la intervención de sus representantes del Sindicato Independiente, Imelda Galeana de Jesús y Alberto Bahena Jiménez,  quienes

dicho sea de paso avalaron la soberbia actitud de Galindo Baza, al responder “nosotros no los autorizamos”, en referencia a la labor de los reporteros que ahí se encontraban, optando finalmente por encerrarse en la oficina para la celebrar la citada reunión.

En tanto, continúan vigentes, en espera de una acción real, las constantes quejas y denuncias contra la actitud de este tipo de servidores públicos, a quienes se les olvida que es el pueblo quien les paga y les da de comer.