Artículo

Trauma sin resolver

Por: Carmelo Corripio Pineda “El Búho”

 

Alejandro vivía en las afueras de Oaxaca. A los 33 años se había enriquecido de la tierra y sus productos; parecía ermitaño, vivía solo --circulaba la versión que había sufrido una decepción amorosa--. Escribía poemas y cuentos que leía a sus trabajadores; algunos se burlaban y decían que eran puras pendejadas. El contenido literario recordaba cómo se inició el crecimiento de Oaxaca, sin energía eléctrica, solo albortantes de aceite alumbraban el centro, el resto de familias lo hacía con candiles, ocotes o carbón; añoraba el chocolate con agua o los atoles en jícara, que servía su mamá al empezar a oscurecer, la cocina era esplendida con su variedad de moles, salsas y especies molcajeteadas con jumiles; el horario le fascinaba, a las 4 de la mañana se iniciaba la faena del campo, eran los trinos de las aves el canto de los gallos o el mugir de las vacas quienes despertaban al Oaxaqueño, habitando la planicie en un valle selvático, creación milenaria y milagrosa por el recorrido de sus ríos que alimentaban bosques, su riqueza forestal. En ese edén nació Alejandro, ahí se baño en las pozas de la Atoyac y el Salado, ahí curtió su piel con los jugos de las coníferas y xerófilas exprimidas por las embravecidas corrientes de los ríos, que con sus afluentes recorrían todo Oaxaca, esa vida idílica la abandono para estudiar la universidad en la ciudad de México; cuando tomo el camión, involuntariamente sus ojos hurgaron dentro de su pensamiento, que no le dijeron nada, solo una infinita tristeza lo invadió, como un presentimiento, como de que algo se había descompuesto, y lloro en silencio sintiendo vergüenza; no sabía que era el tiempo que la vida no se detiene que esta camina construyendo y destruyendo, invisible te guía recogiendo materia para lo que serás, aquella sustancia genética que le da forma a la vida personal sin tomarte en cuenta, ____ pareciera una creación a ciegas por su manera de la marcha titubeante___.

En segundo año de medicina conoció a Ethel Scoot becada de la unión americana para estudios superiores en conservación de mares y bosques; el intercambio entre ellos fue el interés por la ciencia y la investigación.

Ethel: Naci en Washington D.C. Estados Unidos en la avenida Pensilvania aun lado del Potemac y mas allá de la avenida esta el “Capitolio” sobre una colina se yergue majestuoso y maquillado, cuando toma posesión el nuevo presidente de Estados Unidos; ____ y continuo ____ cuando nos casemos tu y yo te llevare de luna de miel a la “Casa Blanca”, al “Pentágono”, al “Edificio del tesoro” y otros más.____ ambos estallando en una risa e iluminando de felicidad sus semblantes____.

Alejandro: Cuando nos casemos te llevare de luna de miel a Oaxaca a recorrer los ríos el Atoyac y el Salado, escalaremos sus pendientes para bañarnos en “lluvia tropical” y la “escondida”, las pozas sagradas localizadas en la espesura de la selva, nadaremos en ellas desnudos y fornicaremos hasta que el vello púbico se desprenda, en el frenesí del baño unir la carne de nuestros cuerpos y el alma en un solo ser, de ser cierto nuestro “amor absoluto” se bendecirá unidos para siempre y felices, de lo contrario se maldecirá con la muerte o desunidos, el hechizo de esta leyenda es cierto se ha comprobado reiteradamente, quienes han acudido a sus aguas sagradas frívolamente destruyeron sus vidas, quienes lo hicieron legítimamente alcanzaron la plenitud y la dicha, está documentado con testimonios, nacimientos, éxitos y desgracias, ___ al terminar de hablar, ambos se miraron pensativos y continuaron caminando por la Avenida Universidad inmersos en sus temores y sueños, guiados cada uno por sus destinos e instintos___.

En un rincón del caserón en Oaxaca, solitario, Alejandro con las manos entre los bolcillos del pantalón observaba inmóvil el horizonte por donde se extendía el valle ___ se decía ___ mañana cumplió 34 años, se cumplen 12 de haber conocido a Ethel Scoot, el episodio lo describo tal como sucedió, sin alterar nada, nos confesamos amor constantemente, comprobamos aparentemente la necesidad del otro, no podíamos estar separados, la admiración era mutua, tenia para mí un valor excepcional que dedicara Ethel parte de su vida para los demás y desviar la ceguera del comercio en la destrucción marítima de las especies, o la de los bosques, que ya amenazan con la extinción del género humano, las reflexiones de ella eran superiores, a las mezquinas que nos ocupan a nosotros al común de la gente, pero ahora me doy cuenta que Ethel carecía de otros valores tan fundamentales y valiosos como la fidelidad y la lealtad, que quizá tengan mayor trascendencia en la escala que construyo Dios. Habíamos convenido vernos en la rectoría de la universidad a las 11:00 de la mañana para entrar al estadio universitario al partido de futbol que seria a las 12:00; el tiempo corría, 11:10 , 11:20, 11:50, 12:00, el partido empezaba y ella no llego, la incertidumbre me condujo a buscarla en las islas de la universidad, donde acostumbrábamos a ir, era domingo y atrás de las albercas están los parajes, camine cabizbajo por los arboles y en un paraje abrazados, una pareja, sigiloso me acerque, con un pensamiento atroz, ¿No podía ser?, le decía a mi pensamiento, reconocí su voz estaba encima de él, su blusa y pantaletas colgaban de una rama, el sin pantalones, solo con camisa y suéter.

Alejandro: ¡Ethel! , y la vio a la cara con odio mortal.

Ethel: Balbuceando, busco una estúpida justificación.

Fue tan instantáneo que no hubo más, regreso a su cuarto, arreglo sus cosas y regreso a Oaxaca; trato de olvidar inmerso en el trabajo, sin lograrlo, el trauma sin resolver continuaba horadando su consciencia; siempre se pregunto ¿Si Ethel era una retrasada mental? ¿No asistió a la cita? ¿Irse con ese individuo, a copular a un lugar público, me parece estúpido? ¿No pensó en la amenaza de que yo pudiera llegar? ¿A la mejor no le importaba, porque no me amaba? Esta escena inolvidable____ se decía____ ¿La perseguirá toda la vida? ¿Hay personas que están diseñadas para hacer daño a los demás? ¿El que da felicidad, recibe felicidad? ¿El que da dolor, recibe dolor?

Traumado Alejandro nunca busco a Ethel, la finura de su espíritu le contestaba a ella con el absoluto olvido, nunca supo jamás, de su paradero.