Opinión

SIN  MIRAMIENTO

Gerardo Lagunas Pineda

 

Y ahora qué sigue? Actualmente se ven tantas cosas relacionadas a los apoyos que reciben los dueños de tierras, sin que muchos de ellos se dediquen a su cultivo. Recuerdo en la época de los sesentas, el agricultor, el campesino, casi no compraba fertilizante para su siembra, puesto que la tierra era demasiado fértil y no necesitaba de ese insumo agrícola. Poco a poco, con el paso del tiempo, esa tierra se le fue menguando su fuerza y en la actualidad quienes se dedican a las labores del campo exigen el apoyo del gobierno para que sigan sembrando, sino, no hay de piña. Dependencias relacionados al agro como Banrural y  la SARH, Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos, ahora desaparecidas, tuvieron mucho que ver para que al campesino se le fueran sus ilusiones de seguir obteniendo mejores cosechas, ya que el ‘’Bandidal’’, así se le conoció el Banco Banrural, entregaba créditos a quienes así se pusiera a mano, aún y cuando quien recibía dicho crédito ni por su mente pasaba el sembrar tierras. Vamos, en una palabra, ni las tenía. Fue tanto su cinismo al momento de trabajar de esa forma, que por inercia el gobierno en turno tuvo que desaparecerlo y con ello dejaba al garete al verdadero agricultor y campesino, que sólo migajas recibió y, con ello, su suerte estaba echada a la hora de no poder sembrar, porque los créditos ya nunca llegaron. Tocante a la otra dependencia federal, la SARH, fue tanto su despilfarro, que en el sexenio de Luis Echeverría, que tenía mentalidad socialista, le aventaba todo el apoyo a dicha Secretaría donde les ponía el ejemplo de cómo los chinos sembraban el arroz en lugares hasta cierto punto inapropiados; es decir, en cerros y a base de terrazas, les aconsejaba que siguieran esos métodos. Fue tanto el apoyo recibido de la administración echeverrista a la SARH, que la bolsa de trabajo se disparó en esa época y, por consiguiente, esos apoyos ya nunca llegaron al campesino, sino que fue absorbido automáticamente por tanto empleado que es la hora que no saben qué hacer con ellos. Así como sucedió en el rubro de la agronomía, las cosas son igual o peor en otras dependencias federales. Allí los casos de la SEP, SSA, IMSS, que un ejemplo pequeño, cuando surgían los IMSS-Coplamar, al final ya no pudieron con el paquete, tanto que el gobierno federal disponía que dichos centros fueran absorbidos por la SSA y de esa manera los trabajadores pasaban a formar parte sin su consentimiento de una nueva dependencia para ellos. La cosa no para allí, también en el Ejército se cuecen habas, poniendo como ejemplo el hecho de que quienes lo conforman nunca han recibido un trato digno para ser merecedores de considerarlos unos soldados al servicio de la patria, ya que las deserciones siempre han estado a la orden del día, llegando a la conclusión de que quienes desertan se van a formar parte de la delincuencia organizada. De allí que nuestra interrogante es… ¿Y ahora qué sigue? No busquemos culpables, porque si decimos que son los políticos, nosotros también tenemos parte de culpa al tener al país de cabeza, ya que si analizáramos al momento de emitir nuestro voto otro país tendríamos. Pero no, nuestro voto siempre ha sido dado por conveniencia y nada más. De allí se agarran los políticos para darnos atolito con el dedo y al final seguir como hasta ahora. Podríamos seguir y seguir escribiendo miles y miles de palabras y  estamos seguros que un minúsculo porcentaje es quien si hace valer su voto a la hora de acudir a las urnas. Se dice que los mexicanos estamos condenados a seguir así porque nuestra cultura de sumisión y aceptación así ha sido, es y será por los siglos de los siglos. Así es que, en definitiva, no nos preocupemos y sólo un milagro nos hará libres…Hay que reconocer, y en lo personal éramos escépticos del gobierno Abarquista, porque la ciudad que gobierna está recibiendo una verdadera transformación en varios aspectos. Por lo tanto, me congratulo con su trabajo, y no piensen que deseo quedar bien con el Alcalde, sino al César lo que es del César y nada más…Un saludo a quien sí es mi amigo, el Lic. Andrés Guzmán Salgado, Regidor de Obras Públicas, que es de los ediles que sí desquitan lo que se le paga y para él no existe selección de gente para extender su apoyo, sino que lo da con agrado. Está pendiente una entrevista con su persona y no se me olvida, pero cuando tengo tiempo él anda haciendo trabajo relacionado a su investidura de edil. No obstante, cuando nos pongamos de acuerdo estamos seguros que le arrancaremos información que será de gran beneficio para la ciudadanía igualteca…Hasta la próxima!