Artículo

Lucha Social Científica: La Caída de un Gobierno en 7 Días

Emilio Nahín Rojas Madero*

“Mi vida por una mejor Nación

 

“Al oír de mí me temerán los terribles tiranos; en medio del pueblo me muestro bueno y en la guerra valeroso”. –Sabiduría 8:15-

 

“El poder político es simplemente el poder organizado de una clase para oprimir a otra”. –Karl Marx–

 

“En cuanto alguien comprende que obedecer leyes injustas, es contrario a su dignidad de hombre; ninguna tiranía puede dominarle” –Mahatma Gandhi –

 

Para comprender la lucha de clases a través de la historia; Karl Marx lo tiene bien conceptualizado en su dialéctica histórica. Néstor Kohan lo diluye en una comprensión más ligera; así que para ahorrarnos el párrafo, vayamos a los acontecimientos que marcaron el inicio de ésta insurgencia nacional mexicana. Cuando el PRI le cedió la presidencia al PAN; fue para calmar los ánimos sociales de la nación, se auguraba una insurgencia. 12 años le hicieron creer al PRI que el pueblo se olvidaría de sus crímenes y que lo encontraría en un estado de paz que lo perpetuaría por otros 71 años en el poder. Pero esos mismos 12 años de no comer del erario público; hizo que estos hombres y mujeres de los tres niveles de gobierno y de los tres poderes de la nación; llegaran con gula y avaricia terrible; consumiendo esos 71 años de posible gobierno en tan solo 9 meses de esta triste administración. 

La simple idea de que la presidencia del 2018 esté en manos del PRI; ya es mera utopía; probablemente sea la razón por la que están privatizando los recursos energéticos, no solo Pemex. Después de todo ¿Quién se atreverá a ser el presidente de una nación sin fuentes de capital que fortalezcan su Producto Interno Bruto? En el 2018 México será una nación hundida en la extrema pobreza; África es el reflejo de lo que mañana será México y el mundo gracias al capitalismo Estadounidense. La violencia, el desempleo y los salarios mal pagados orillaron a los mexicanos a tomar dos vías de lucha de clases: la Social Pacifica (Movilización) y la Social Radical o Violenta (Armada). Cuando Gene Sharp planteo sus teorías sobre la lucha pacífica en su libro “De la Dictadura a la Democracia”; se le olvido estudiar a la clase  política mexicana; pues es cínica ante las mentadas y las megamarchas, por lo que sus preceptos al menos en México quedan sin fundamento.

Y la lucha social radical manifestada por las armas; tampoco es la solución si se desconoce al enemigo y los objetivos a perseguir. Aunado al hecho de que la presidencia a través del asesor presidencial cuyo nombre es “innombrable” ya está tomando sus precauciones para constituir un ejército especializado en contra de los grupos de autodefensa (Movimiento que ya se internacionalizo y es retomado en otros países). Más ante el hecho de que por primera vez se constituyó el primer grupo de autodefensa urbano en todo el país (Morelia, Michoacán); cuando todos habían sido rurales. Es un error la alternativa de las armas cuando el salinismo está dejando en libertad a grandes personalidades del crimen organizado ¿Qué clase de personas crees que conformarán parte de ese ejercito especializado para someter a la sociedad civil?

Por ello la lucha social no debe ser simplemente Radical o Pacifica; sino también Científica. La Lucha Social Científica es la que delimita los objetivos, las acciones y los enemigos. Es la que le permite a la radical y pacifica tomar acciones más contundentes en contra del enemigo y establece los tiempos fijos para aprovechar las coyunturas. Y efectivamente el “tiempo” es el peor enemigo de cualquiera de las dos luchas sociales muy implementadas. Ya que mientras más tiempo dure un movimiento pacífico o radical; tiende más rápido a ser un rotundo fracaso por su desgaste físico y económico. Aunado al hecho de que tanto gobierno como delincuencia terminan por infiltrarse en ambos movimientos, desprestigiarlos y disolverlos; caso Técpan de Galeana con su policía comunitaria secuestrada por los grupos criminales.

La reciente victoria del magisterio en la toma del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México el 28 de Octubre del 2013; en términos coloquiales fue pura suerte de principiantes. Pero aplaudible porque están aprendiendo a hacer lucha social científica; con acciones medulares de gran impacto en la estructura gubernamental. Pues ese 28 de Octubre el gobierno federal tembló; ya que necesitó convocar a la policía federal de seis entidades federativas para enfrentar al magisterio que se dirigía al aeropuerto. Dejando desprotegido al resto del país y dependencias vitales para la funcionalidad de los gobiernos; haciendo ver que el gobierno de Enrique Peña Nieto, es de cristal, de plafón, escenografía televisiva.

Ahora se hace necesario preguntarnos ¿Qué sigue después del 8 y del 15 de septiembre? Si el pueblo mexicano desea desterrar el sistema político que impera, es un error ir a una marcha sin objetivos claros, es un error seguir a un hombre, un caudillo, un ídolo. Las mentadas y marchas son inofensivas frente a una clase política de cínicos. Luego entonces ¿Qué hacer? –“Dijera Lenin”–. Los teóricos y sociólogos de las ciencias sociales propondrían que las grande movilizaciones como la del 28 de Octubre y las ocurridas durante los días 1, 2, 3, 4 y 5 de Septiembre; deberían organizarse para paralizarle tres instalaciones fundamentales al gobierno federal, poniéndolo de rodillas.

Un primer contingente en dirección al Aeropuerto de la ciudad capitalina; el segundo en dirección a la Bolsa de Valores y el tercero en dirección a la Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y acampar en ellas únicamente por siete días. Impidiendo que éstas entren en funciones; dormitar en el zócalo o mantenerlo tomado es una pérdida de tiempo. La toma del aeropuerto destruiría los proyectos empresariales del gobierno; la toma de la Bolsa de Valores y la SHCP, evitaría que entre dinero a las arcas públicas. Ello provocaría que el gobierno no pueda pagar los salarios de burócratas, marinos, soldados y policías federales; quedándose solos y sin golpeadores que los protejan. Si la fuerza pública defiende a estos gobiernos; es porque reciben un salario, pero cuando el patrón ya no les paga; estos simplemente le abandonan.

La reciente lucha magisterial y su declaratoria de ser insurgente no debe tardar más allá de los 7 días si realmente pretende alcanzar el triunfo en contra de la reforma educativa; y la población tampoco debe quedarse tanto tiempo inmersa en esa lucha, porque podría llegar a ser utilizada como simple cortina de humo para aprobar el resto de las reformas estructurales (energética y hacendaria). El peñanietismo es un mosaico multihistórico; pues en él se muestra una fusión de toda la historia mexicana. Pues a pesar de que estamos viviendo en el año 2013; este gobierno tiene una mescla entre el Prehispanismo, la Colonización, el Virreinato, el Santaannismo, el Porfiriato y el Salinismo. Y todos estos imperios o etapas de México, siempre terminaron en Guerra; porque los hombres no usaron las ciencias para luchar.

La lucha social científica es aquella que se encarga de definir al enemigo; sus fortalezas, debilidades y establece las acciones más contundentes para derrotarlo sin disparar una sola bala y en el menor tiempo posible. Sin enviar a un puñado de hombres a una marcha pacífica donde los tomen presos y les hieran, sin ganancia alguna para la causa. Solo 7 días son suficientes para que un gobierno sin entrada de víveres y recursos económicos, sea derrumbado. Los 7 días son fatales para la economía de un imperio, no se repone fácilmente de esa pérdida económica, de ese boquete fiscal. Por lo que se vuelve dócil y temeroso ante su pueblo; pero es decisión del pueblo si pretende caminar hacia una marcha de resultados o una marcha de protagonismos caudillistas y mera simulación de lucha social.

 

DATOS:

Lucha Social Radical (Armada): El 55.8% del territorio mexicano cuenta con grupos de autodefensa. 52 policías comunitarias y solo una policía popular urbana en Michoacán. 13 Entidades Federativas se han sumado a los grupos de Autodefensa (Sonora, Chihuahua, Hidalgo, Veracruz, Tabasco, Chiapas, Oaxaca, Puebla, Morelos, Edo. Méx., Guerrero, Jalisco, Michoacán).

Lucha Social Pacífica: Tomándose como referente la Insurgencia Magisterial; el 54% del territorio mexicano se encuentra en movilizaciones pacíficas. De 22 Entidades Federativas declaradas en apoyo, solo 13 se han sumado en acciones de resistencia (Baja California Sur, Chihuahua, Durango, Zacatecas, Nayarit, Jalisco, Michoacán, Edo. Méx., DF, Tlaxcala, Veracruz, Oaxaca, Guerrero, Chiapas y Quintana Roo). De las cuales solo en 3 entidades se aprecia la participación del SNTE.