PATADAS BAJO LA MESA
Moisés Ocampo Román
Hace unos días en un programa de TV local estaban hablando de la libertad de expresión. Para esto invitaron al dueño de la radiodifusora XEIG, Sergio Fajardo. En un momento de la entrevista a este personaje mandaron un mensaje de texto al teléfono celular de uno de los conductores, en donde le decían que la libertad de expresión NO existía en esa emisora radial, y al parecer dedujeron que fui yo quien mandó ese mensaje, aunque esta persona se identifico como JM Carreón. Respecto a esto debo aclarar que no le tengo miedo ni al diablo, y todo lo que escribo es con mi nombre porque los seudónimos son para los cobardes. Siempre todo lo que expreso lo sostengo, y hasta ahora nadie ha refutado lo que digo.
Ya aclarando dicho infortunio, debo aconsejar al munícipe José Luis Abarca, esperando que NO me haga caso, pero que es el momento de dar un giro al timón de muchos grados. Y para eso tiene que deshacerse de varios directores, entre ellos que es el más sonado el de la dirección de Tránsito, en donde el titular no entendió que aparte de servirle al Presidente él viene de una corriente que en Iguala representa el síndico Mario Castrejón, y que éste tiene una carrera política por delante, pero con este tipo de gente definitivamente el abismo está profundo, y más en política.
Edelmiro “El Tata” Castro Sedano no entendió que la política es así. Y no lo entendió por su soberbia y su “pedorrobia” de la cual siempre lo ha caracterizado, porque este profesor retirado nunca ha tenido amigos, sólo compromisos amistosos, y lo sabe perfectamente el síndico Castrejón. El septuagenario director se ha dedicado a tener una actitud “hitleriana” ante el pueblo y ante sus súbditos; se quedó en sus tiempos de poder al estilo del PRI, y más aún, cree que la virgen lo parió porque su estilo de comportarse dista mucho de su amigo y casi carnal Mario Castrejón.
Hace un mes me habló una amiga que estimo y quiero mucho, y me dijo: “bájale cabrón a tus críticas. Te estás pasando con Abarca”. Y después remató diciendo: “Abarca es gente de Lázaro…”. De esto último debo decir que el profesor Edelmiro Castro en una reunión en el auditorio municipal, cuando Lázaro Mazón era presidente municipal por segunda vez, sentaron al Presidente para acusarlo de todo porque los dueños de las zapaterías de Iguala estaban molestos porque se puso un tianguis de zapatos de la ciudad de León dentro de la Preparatoria 32, y ellos querían que se fueran. Así que Edelmiro le dijo al doctor Lázaro Mazón hasta de lo que se iba a morir; fue grosero como lo caracteriza. Luego entonces, ¿por qué mi amiga NO le dice como trató al actual secretario de salud en el estado? ¿Y ni así lo va a correr? En aquel entonces Lázaro Mazón me dijo: “háblale al profesor Edelmiro y dile que quiero hablar con él”. Y así lo hice y me contestó Edelmiro Castro: “dile a ese pen… que no quiero hablar con él”. Y pretende seguir en su puesto siendo un gobierno emanado del doctor Lázaro Mazón? Además hace unos días en el pase de lista de la corporación de Tránsito, este tipo dijo: “a mí me puso el presidente y él me tiene que quitar. Ni el secretario ni el síndico lo pueden hacer”. Esto lo dijo cuando un agente de tránsito no le obedeció una orden. Entonces, ¿qué chingados esperan para correrlo?