Opinión

Tribuna Pública

Francisco Javier Copeño Castro

Después de 10 meses de arduo trabajo llevado a cabo por la empresa constructora encargada de realizar los trabajos de remodelación de la Nave de Ropa y Calzado en el Mercado Municipal “Gral. Adrián Castrejón” de la ciudad de Iguala, Gro., se tiene programado el regreso y funcionamiento de dicho lugar en unos cuantos días, con lo que el gobernador Ángel Aguirre Rivero, habrá cumplido un compromiso de campaña con los locatarios de la ciudad de Iguala..

Como se recordará, todo empezó con la petición de los locatarios que realizan sus actividades comerciales en esa nave, al entonces candidato a gobernador Ángel Aguirre Rivero, quien abanderaba a una Coalición Guerrero nos Une, que aglutinó a los partidos de izquierda en el Estado, comprometiéndose a que en caso de obtener el triunfo se llevarían a cabo dichos trabajos.

Una vez obtenido el triunfo, se volvió a insistir en el cambio de la techumbre de dicha nave que representaba serio peligro por los constantes movimientos telúricos que tenían en jaque a los comerciantes y que cada vez veían correr mayor peligro su patrimonio.

De manera inmediata se giraron instrucciones por parte del ejecutivo y se empezó con todos los trámites para la realización de la obra que primeramente se iba a realizar en el área de mayoristas, pero después de una reunión entre líderes del Mercado Municipal “Gral. Adrián Castrejón”, se acordó que todo el recurso destinado para obras en el mercado, fuera destinado a la remodelación de la Nave de Ropa y Calzado.

Fue así que se autorizó que la obra iniciaría en los primeros días del mes de mayo, misma que se dijo en un principio que se terminaría el 15 de diciembre del 2012, cosa que no sucedió, por infinidad de contratiempos encontrados.

Desde un principio la empresa constructora encabezada por el superintendente de la obra arquitecto Jesús Soto Favela y sus ingenieros residentes, encabezados por Antonio Muñoz, se encontraron con muchas dificultades para empezar con los trabajos, porque los comerciantes de esa área, no creían que en verdad se llevaría a cabo el cambio de techumbre; además de que los comerciantes del Pasillo Central o de la Virgen, llamado también de los Huaraches, no querían salirse; tan es así que los trabajos de demolición empezaron con dichos comerciantes en ese lugar.

Fue en el mes de mayo de 2012, cuando se empezó la demolición, y en julio empezaron a descarificar las columnas para poder ampliarlas y a finales de ese mes, ya se empezaron a ver las primeras columnas.

Para el mes de octubre, ya se tenían todas las columnas y solo esperaban que llegara el material para empezar a colocar la estructura de la techumbre, cosa que empezó a tomar forma en el mes de noviembre; fue hasta entonces que los comerciantes del Pasillo Central, tuvieron que salirse para poder trabajar en esa área, porque los ingenieros temían que se les cayera algún material y fueran a lesionar a alguien.

Sin embargo y a pesar del riesgo que corrían, los locatarios del Pasillo de los Huaraches solicitaron que se les diera chance trabajar en la temporada Guadalupe-Reyes con su vendimia y no dejar pasar la oportunidad de vender sus productos de temporada en ese lugar; los ingenieros y el arquitecto Jesús Soto, después de diálogos y compromisos, finalmente accedieron y ambas partes siguieron trabajando.

Para el mes de diciembre los trabajos de reconstrucción de la Nave de Ropa y Calzado, presentaba un avance del 65 por ciento de la obra; porque ya se habían parado los muros de los locales, algunos dirigentes y a decir de los mismos ingenieros, ni los dejaban trabajar porque a cada rato iba uno a solicitar información, otros con alardes e ínfulas de poder diciéndose amigo del gobernador querían ser atendidos de manera inmediata, aun y cuando no tenían nada que hacer en dicho lugar, pero que en atención a las personas de las que solían acompañarse, siempre les brindaron todas las facilidades para “supervisar la obra”.

Para el mes de enero, se empezó con los trabajos de pavimentación de áreas adyacentes y la construcción de los tapancos para las bodegas de cada uno de los locales, y a finales de ese mes, se empezó con la instalación del cableado de la red de energía eléctrica, colocación de lámparas en los pasillos y el aseo general de toda la obra; asimismo empezaron a revisar todos los detalles que se necesitaban.

Para los primeros día del mes de febrero, la obra está casi terminada, solo faltan algunos pequeños detalles; las cortinas de cada uno de los locales y de las entradas principales ya fueron colocadas el pasillo central de ha estado abriendo de manera intermitente porque se sigue trabajando, pero en términos generales prácticamente la obra, está terminada.

Los locatarios de esa nave, no podrán quejarse de la obra porque les hicieron un trabajo de lujo, bien iluminado y con sus respectivas bodegas, ahora solo falta que ellos cuiden y mantengan el orden para que su mueva Nave luzca de lo mejor, de no hacerlo de esa manera podremos decir que no agradecen el trabajo realizado por todos los involucrados en la realización de dichos trabajos.

El agradecimiento y reconocimiento porque los comerciantes de esa Nave hoy tengan un espacio de lujo, deberá ser primeramente para el gobernador Ángel Aguirre Rivero, por haber cumplido con un compromiso asumido en campaña; también para los encargados de realizar dicha obra, por el empeño y dedicación que tuvieron para hacer que dichos trabajos hayan quedado de lujo; asimismo para todos los locatarios de las diferentes áreas del mercado que contribuyeron con su voto, para que el recurso destinado para el Mercado Municipal Gral. Adrián Castrejón, se invirtiera en donde más se necesitaba y también para ellos mismos, porque durante un poco más de diez meses sufrieron las inclemencias del tiempo y las bajas ventas que tuvieron, pero que hoy deben aceptar que bien valió la pena el sacrificio que se hizo. En hora buena y que cuiden el trabajo que costó tener un espacio como el que a partir de unos cuantos días más tendrán, para comercializar sus productos al público consumidor que a pesar de las tiendas departamentales existentes en la ciudad, sigue confiando en su mercado. ¡Hasta la próxima y salud!