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Confiesa y pide perdón a su padre, Raúl Velasco…

Descompuso Alma Rosa maquinaria de El Correo

* Revela Velasco García favores a José L. Abarca y esposa…

* Regresó 100 mil pesos por el pago de unas publicaciones…

* Hostigada por autoridades municipales cancela obra de teatro…

 

Roberto A. Márquez Añorve

 

100_5901Fiel a su costumbre, Alma Rosa Velasco García se abre de capa y en conferencia de prensa celebrada esta mañana en céntrico restaurante de la ciudad, reveló favores que hizo al actual alcalde José Luis Abarca y esposa, María de los Angeles Pineda de Abarca, por cuya “amistad”, dijo, se vio en la necesidad de descomponer la maquinaria del Periódico El Correo (entonces propiedad de su padre, Raúl Velasco Vázquez), así como regresar cien mil pesos que ya había cobrado por el pago adelantado de unas publicaciones que un cliente solicitó para dar a conocer la forma “irregular” en la que el matrimonio Abarca-Pineda había adquirido los terrenos para edificar lo que hoy es “Galerías Tamarindos”…

“Ya basta. Estoy harta del hostigamiento por parte del señor José Luis Abarca. Yo sólo les pido que me dejen trabajar. Ya no hay periódico, hoy me dedico a la realización de espectáculos y a la venta de publicidad. Soy una mujer sola y hablo a título personal. Mis padres son ya dos personas muy mayores de edad, y lo único que pretendo es trabajar de manera honesta. No se vale que me hayan quitado todos mis carteles de publicidad, consecuencia de tal presión, me suspendieron la obra de teatro que se iba a presentar el próximo martes 13 de noviembre y por lo cual ya había gastado yo una buena cantidad de dinero que estoy perdiendo. Es por eso que voy a revelarles un secreto que yo pensé que mi padre, mi madre y su servidora nos íbamos a llevar a la tumba…

“Estoy harta de que me bloqueen eventos y perjudiquen mi economía. Exijo al gobierno municipal de José Luis Abarca Velázquez me dejen trabajar en paz y se termine el hostigamiento en mi contra. No porque ya no contemos con el periódico El Correo van a afectarme como empresaria artística. Voy a defenderme como lo hice con Lázaro Mazón en su momento y apenas con Raúl Tovar, a pesar de que Abarca resultó peor…”.

La empresaria igualteca, hija del decano periodista Raúl Velasco Vázquez, ex propietario y director general del periódico El Correo, expuso que debido a la represión y hostigamiento que ha venido sufriendo por parte de la administración municipal a través de la Dirección de Reglamentos, cuyos agentes retiraron y desaparecieron toda su publicidad del centro y otros puntos de la ciudad. “Me pidieron que no colocara publicidad en el primer cuadro de la ciudad. Yo les pedí que en cuanto quitaran la manta de supuesto agradecimiento a José Luis Abarca que luce en pleno centro de la ciudad, yo retiraría las mías, dando y dando”, subrayó.

Mencionó haber tenido un penoso incidente con el director de Reglamentos, Rafael Salgado Velázquez, a quien tuvo que recordarle “todos los favores que iba a pedirle a mi padre, a lo cual me contestó que él cree que nos había ayudado más”.

Consecuencia de tal hostigamiento por parte de las autoridades municipales le fue suspendida la obra de teatro “Don Cual Tenorio” que presentaría el próximo martes 13 de noviembre, cuyo productor habrá de presentar en Chilpancingo, con la consecuente pérdida por los gastos realizados en publicidad y otros.

Mencionó que tras la discusión con el titular de Reglamentos pretendió entrevistarse con la que consideraba su “amiga” Angeles Pineda de Abarca, pero ni siquiera pudo verla al enterarse que estaba prohibido el paso para ella a las oficinas presidenciales.

Fue en ese momento que se atrevió a revelar los favores que en su momento ella hizo por José Luis Abarca, su mamá y su esposa Angeles, relatando el cobro de cien mil pesos a un cliente que solicitó la publicación en El Correo de los documentos que acreditaban la venta irregular y amañada de los terrenos donde se construyó “Galerías Tamarindos”, dinero que más tarde tuvo que regresar por solicitud de su amiga Angeles Pineda de Abarca, quien le insistió para que no publicara nada y le dio los 100 mil pesos que regresó al cliente, lo cual le provocó un disgusto con su papá, el periodista Raúl Velasco, quien días después se comprometió con ese cliente a la publicación de la nota solicitada sin costo alguno.

“Fue por eso que me vi en la necesidad de descomponer la maquinaria de El Correo. Fui yo quien descompuso la máquina para que no saliera el periódico y la nota. Hoy lo confieso y pido perdón a mi padre, porque recuerdo muy bien como sufría yendo y viniendo para que el periódico saliera y para que se arreglara la máquina que yo había descompuesto y que luego originó el desplome de nuestro medio. Yo no podía dormir y no soportaba el cargo de conciencia, hasta que mi madre me dijo pídele perdón a tu padre y dile la verdad. Así lo hice, para lo cual mandé traer a José Luis Abarca, su mamá y su esposa Angeles, para que ellos fueran testigos del perdón que pediría a mi padre por lo que había hecho…

Relató también otros incidentes que tuvo con gente cercana a José Luis Abarca en tiempos de campaña, cuando ya José Luis era el candidato del PRD y ella le trabajó la publicidad a Antonio Jaimes Herrera, quien fue el candidato del PVEM a la alcaldía y lo que considera pudo provocar el coraje a los Abarca. “Desde entonces intenté hablar con él personalmente pero nunca fue posible, al grado tal de que le hice una carta que mi amigo Enrique Ocampo me hizo el favor de entregarle en sus manos. Carta a la cual hoy le voy a dar lectura…

Acusó a la señora Ángeles Pineda de Abarca, Rosa Tovar y otras damas igualtecas, de haber sido quienes le hablaron mal de ella a la esposa del gobernador Ángel Aguirre, señora Laura del Rocío Herrera, quien le había prometido apoyo para el funcionamiento de su albergue para animales de la calle y luego le llamó “arrogante y altanera”, negándole todo el apoyo ofrecido anteriormente.

Concluyó diciendo que no va a dejarse, que prefiere que le llamen “canija”, pero no tonta, además de anunciar la salida en breve a la luz pública de un periódico esencialmente gráfico.