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Séptimo Sello

Agustín Mazón Barrera

La situación es crítica en todo el país, ante el incremento en el precio del huevo, que ha alcanzado cifras escandalosas de hasta 42 pesos el kilo, más del 100 por ciento de su costo normal.

Todo esto fue propiciado por la presencia de la gripe aviar en el estado de Jalisco y algunas otras regiones de México, que obligó al sacrificio de millones de gallinas y por lo tanto mermó la producción tanto de su carne como del huevo.

Antes de este hecho, las expresiones eran, vamos a comer aunque sea huevo con frijoles, pero ahora es más fácil consumir carne porque casi cuesta lo mismo.

Y como siempre, la crisis le pega a quienes menos tienen, porque para muchos el huevo era su dieta diaria en todas las diversas y diferentes maneras de prepararlos y ahora tendrán que aumentar el consumo de tortilla, para suplirlo.

Las declaraciones de funcionarios federales que llaman a la población a dejar de consumir ese producto, suena ridícula, más bien a mentada, porque todos estamos acostumbrados a ese alimento de diferentes maneras.

En cambio es loable la medida tomada por el jefe de gobierno de la ciudad de México, quien comprará miles de toneladas en el extranjero para el mercado local y que los defeños no padezcan por la escasez de ese alimento.

De igual forma, como medida emergente algunas tiendas departamentales se han solidarizado con los mexicanos y se comprometen a expender el producto a un menor costo, lo cual también es de reconocerse.

Aunque las compras de pánico no se han hecho esperar, pues como en toda crisis, la rumorología hace su aparición y se dice que el precio se elevará hasta a 70 pesos, que todo el producto ya está en manos de acaparadores y en el mercado no hay, en fin diferentes cuestiones que vienen a agravar esta situación.

Y que nadie se atreva a acudir a la PROFECO, porque eso y la carabina de Ambrosio son lo mismo, se concretan a decir que eso no es de su incumbencia y nada pueden hacer para regular el costo del producto.

Esta situación nos obliga a buscar una alternativa para sustituir de nuestra dieta al huevo. De que existen, no hay duda. La cuestión es encontrarla, porque probablemente para los consumidores nada podrá sustituirlo de su gusto.

Pero en esta temporada, hay muchos productos del campo que cuestan mucho menos y son más nutritivos, todo es cuestión de enfoques y encontrarle el gusto a las legumbres y verduras, que, insisto, abundan en esta época y a buenos precios.

Por sus obras los reconocerán.

Y a ver quien se identifica con el signo siguiente, de nuestro horóscopo vespertino…


SAGITARIO (22 Noviembre ~ 21 Diciembre):
Usted se cree optimista, aventurero y tiene una fuerte tendencia a hacer todo de manera mediocre, su falta de constancia hace que no termine nada de lo que comienza, nada se lo toma en serio, vive en una estúpida burbuja de sueños infantiles y pendejos. Usted reúne todas las condiciones para ser inmaduro, indisciplinado, infantil irresponsable, sin concentración y limitado. Eso explica el por qué la mayoría de los sagitarianos nunca logran nada.
Son excelentes meseros, trotamundos y huevones.

Y ahora ¡aguas! No se les vaya a ocurrir preguntar lo mismo…

El marido le pregunta a su mujer:
- ¿Querida, cuando me muera vas a llorar mucho?
- Claro. Sabes que lloro por cualquier pendejada.