Cómo se gana sin campaña
Agustín Mazón Barrera
Para
el flamante senador perredista electo, Socorro Sofío Ramírez Hernández, hacer
campaña como decía Enrique “no tiene la menor importancia”. Y lo demostró al
haber obtenido el triunfo en el pasado proceso electoral, sin haber realizado
actos proselitistas…
Por
ejemplo, en Iguala, salvo en dos ocasiones que se presentó, no se le volvió a
ver.
Ramírez
Hernández aceptó no haber hecho campaña por estos rumbos; sin embargo, su
justificación fue que en la región de La Montaña, de donde es originario (no
olvidar que fue alcalde de Tlalixtaquilla y diputado), los candidatos a
senadores obtuvieron la votación más alta de todo el estado…
Y
dijo que eso habla de que el “regionalismo jala, el paisanaje jala”; es decir,
su apuesta fue a el regionalismo y no a la presentación de propuestas, no la
realización de una campaña formal para convencer a la ciudadanía de emitir el
voto a su favor…
Y
no conforme con haber empezado a meterse en honduras, le puso más crema a sus
tacos y dijo que “una aspiración legítima al Senado de la República, no debe
medirse por 60 ó 90 días de campaña, y según él, lo más importante es lo que ha
aportado a Guerrero durante 23 años ininterrumpidos de trabajar por el estado…
Con
esto queda demostrado que en nuestro sistema, hay quienes pueden llegar a ser
representantes populares sin hacer campaña, ni haber convencido al electorado,
que se frieguen otros… Ya lo demostró Sofío, con la mano en la cintura y sin
descapitalizarse política y económicamente, es senador…
Según
Socorro Sofío, él no es un hombre que haga campaña o que visite al electorado
en esos momentos y, por ejemplo, estos no son tiempos electorales y sin embargo
recorre todas las regiones para sostener varios encuentros…
Lo
que no dijo fue que esas reuniones tienen un sentido y obedecen a sus propios
intereses. Lo hace con diferentes personajes de la política para hacer algunos
“amarres”, al fin el pueblo ya votó y no lo necesita para nada…
Las
viejas costumbres priístas no se le han olvidado y tan solo es perredista por
conveniencia y no por convicción…
¿Cómo
ven a nuestro senador?