TODO TIEMPO

Por: Efraín López Morales


La convivencia de la clase política estatal priísta la tarde del pasado Viernes en Iguala, encabezada por el gobernador Héctor Antonio Astudillo Flores, va más allá del espaldarazo a las aspiraciones político-electorales del subsecretario de Finanzas de Salud estatal, Juan Manuel Santamaría Ramírez, cuya fiesta de cumpleaños fue la causa justificatoria de la convocatoria. Para mostrar que no le disputan la futura candidatura a alcalde, diputación local o federal con cabecera en Iguala, sería suficiente la concurrencia de los principales actores políticos tricolores de la región, como Érick Catalán Rendón, David Gama Pérez, el actual alcalde de Iguala, Herón Delgado Castañeda, los dirigentes partidistas municipales de la jurisdicción territorial, el diputado federal Salomón Majul, el propio senador Esteban Albarrán Mendoza, o Carlos de la Peña Pinto, por su condición de jefe inmediato superior del festejado, entre otros. La participación además de Manuel Añorve Baños,  Flor Añorve Ocampo, Sofío Ramírez Hernández, Heriberto Huicochea Vázquez, Juan José Castro Justo, entre otros del ámbito estatal, denota que están conscientes de los riesgos para el PRI en la elección constitucional del año próximo, que los presiona a unificarse para contrarestar los efectos negativos de la división interna y buscar asegurarse la mayoría de los puestos de representación popular que estarán en juego. Para ello es necesario reincorporar inclusive a los que habían defeccionado de la fila tricolor, como el dos veces ex gobernador Ángel Heladio Aguirre Rivero, a quien el senador Sofío Ramírez Hernández, vuelto al PRI, ya habría invitado a "ir juntos" (en el tricolor, obviamente). La presencia en el mencionado festejo de la diputada plurinominal Silvia Romero Suárez puede ser indicativo de que el "jefazo" no ha descartado volver con sus antiguos compañeros de partido, pues sus votos, que los tiene, en especial en la Costa Chica de Guerrero, pueden contribuir para inclinar la balanza electoral en uno u otro lado. Por eso la interpretación de que la citada reunión fiestera de Iguala va más allá del espaldarazo a un proyecto político-electoral local, independientemente de los efectos positivos que representa para Santamaría Ramírez . . . Saludos a todos.