LECTURA POLÍTICA

Noé Mondragón Norato

Huicochea: linchar a su alcalde
Para que la comparecencia del alcalde capitalino priísta, Marco Antonio Leyva Mena –prevista para “las próximas semanas”-, tenga un verdadero valor político no solo para la dirigencia estatal del PRI, sino para toda la militancia tricolor y la ciudadanía en general, tendría que incluir también, no solo a otros alcaldes tricolores metidos en la polémica sistemáticamente, sino sobre todo, al propio mandatario estatal, Héctor Astudillo Flores. Hay que ir por partes.
HUICOCHEA: LINCHAMIENTOS.- Desde hace unas semanas, la disputa política interna entre el dirigente estatal del PRI, Heriberto Huicochea Vázquez y el alcalde capitalino, Marco Antonio Leyva Mena, ha saltado al entramado público. Pero es el primero de ellos quien decidió asumir la condición de inquisidor político. Y se lee así: 1.- El dirigente estatal del PRI, Heriberto Huicochea, busca que el alcalde “comparezca” no ante el Congreso local -donde es su obligación hacerlo-, sino ante ladirigencia estatal del PRI y hasta en los niveles seccionales de ese partido. Es decir, enfrentará las preguntas y cuestionamientos de las bases. Se entiende que el edil “dará un informe pormenorizado de las acciones que está realizando como alcalde”, de acuerdo a la versión del propio dirigente estatal tricolor. Pero el punto es que se trata de una venganza política. Porque el fin de dicha comparecencia, consiste en ridiculizar al edil Marco Antonio Leyva Mena. Por una elocuente razón: sus acciones, gestiones y resultados como autoridad municipal, no le han servido a la ciudadanía de la capital. Huicochea, quiere hacer leña del árbol caído. 2.- Muchos alcaldes del PRI están en el centro de la polémica. Destacan: el de Chilapa, Jesús Parra García –que no baja la violencia y la inseguridad en su municipio-; el de Iguala, Herón Delgado Castañeda, quien no puede con la delincuencia ni con la movilidad de los dirigentes sociales que lo atenazan y recurre a la represióncontra ellos; el de Taxco, Omar Jalil Flores Majul, cuya estadística criminal le crece a pasos agigantados; y el de Arcelia, Adolfo Torales Catalán, quien mantiene una disputa abierta con la Policía Tecampanera, por viejos resabios atribuibles a señalamientos en su contra por presumibles apoyos delictivos. El dirigente estatal del PRI, no mostró una agenda en relación a cuándo “comparecerán” ante ese partido, estos alcaldes. Va directo contra Leyva Mena. 3.- Si lo que el PRI estatal pretende cuestionar del alcalde capitalino, es su ausencia de resultados como autoridad –que son visibles en demasía-, un ejerciciosaludable y democrático en ese sentido, es que la propia militancia tricolor tuviera el acceso también, para poner en tela de juicio aquellos arrojados por el propio mandatario estatal, Héctor Astudillo. Porque si Heriberto Huicochea, pretende asumir la condición de Gran Jurado Priísta, debe llamar a “comparecer al mandatario estatal, emanado de esas filas partidistas. De otra forma, acusaría linchamiento político contra el edil capitalino. Y complacencia política deliberada a favor del mandatario estatal, cuyos resultados como autoridad también están en el centro del debate público. Lejos de fortalecer al PRI, la comparecencia de Leyva Mena, podría traducirse en el agudizamiento de sus crisis políticas internas. Y otro error político para Heriberto Huicochea.

HOJEADAS DE PÁGINAS…Si el despacho jurídico “Olea y Asociados”, del que es accionista mayor el actual fiscal del Estado, Xavier Olea Peláez, está asumiendo la defensa legal del diputado local con licencia, Saúl Beltrán Orozco –de acuerdo a señalamientos del Movimiento por la Paz de San Miguel Totolapan-, entonces las expectativas para detenerlo y consignarlo,son nulas. Porque el fiscal es juez y parte. Con todos esos señalamientos, ¿Podrá seguir sosteniéndolo el gobernador, en la titularidad de la FGE? ¿O seguirá apostándole a los “resultados” de las inercias?