En el debate. Aguirre, de lo trágico a lo absurdo. ¿Y los 43? Por: Lizeth López Curiel

En el debate. Aguirre, de lo trágico
a lo absurdo. ¿Y los 43?

Por: Lizeth López Curiel

De no ser trágico, sería absurdo el momento que eligió Ángel Aguirre Rivero para reaparecer en el escenario político de Guerrero. Lo peor es que, al mismo tiempo, se percibe tragedia y burla.
Este domingo el ex gobernador decidió salir a placearse por Acapulco, incluso ofreció una conferencia de prensa. La pregunta obligada no se hizo esperar: ¿Y  los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa?, por respuesta, un exceso del ex gobernador, pues exigió que  “los busquen y castigo a los responsables”, olvidando que por no encontrar solución a ambas demandas luego de los hechos deIguala el 26 y 27 de septiembre de 2014, se vio orillado a solicitar licencia a su cargo.
La reaparición se da en “homenaje” a segundos aniversarios, tanto de la tragedia llamada “Caso Iguala” -sucedida en su mandato como gobernador de Guerrero-, como la cercanía al 23 de octubre, día de su pública salida de la administración estatal.
El desconcierto para unos, repudio para otros, en torno al momento de la reaparición del ex gobernador, llegó a la par. Se cumplieron dos años de los trágicos acontecimientos de Iguala, aquellos registrados durante su segundo mandato como jefe del Ejecutivo estatal. “Exigimos cárcel para Tomás Zerón por alterar las evidencias y la investigación en el caso de Ayotzinapa, para Ángel Aguirre y principalmente para Enrique Peña Nieto por  ser responsable de la política de seguridad de nuestro país”, señalaron los padres de los 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” al cumplirse 48 meses de la balacera de Iguala y la desaparición de sus hijos.
Más trágico aún, la reaparición se registra a escasos días de que dos estudiantes de esa normal resultaran muertos en un asalto a una urban cuando regresaban a su plantel educativo el pasado 4 de octubre.
El tema Ayotzinapa es, sin duda, una de las mayores sombras de la carrera política de Aguirre Rivero. Presente aún en la memoria de Guerrero están aquellos también trágicos acontecimientos del 12 de diciembre de 2011, cuando en el marco de una manifestación más de los normalistas, exigiendo cumplimiento a su pliego petitorio, se registró un enfrentamiento entre los estudiantes y la policía que dejó como saldo la muerte por armas de fuego de los alumnos Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús, así como el fallecimiento de Gonzalo Miguel Rivas Cámara, al intentar apagar el fuego de dos bombas dispensadoras de gasolina. Los normalistas y organizaciones no gubernamentales exigieron, sin éxito, juicio político en contra de Aguirre Rivero, en tanto la Comisión Nacional de Derechos Humanos informó que el gobierno de Guerrero no acató las recomendaciones hechas después de la muerte de los estudiantes.
Previamente, durante su interinato de 1996 a 1999, se registró otro trágico acontecimiento, el asesinato de diez indígenas mixtecos y un estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México el 7 de junio de 1998 en la comunidad de El Charco, municipio de Ayutla de los Libres, cuando una partida militar atacó la Escuela Primaria “Caritino Maldonado Pérez”, en cuyo interior se encontraba un grupo de estudiantes de la UNAM haciendo labor comunitaria.

Hoy la apuesta de Aguirre Rivero es clara, pensar que el pueblo de Guerrero no tenga memoria. De ser así, ya afirma que no descarta buscar un cargo de elección popular en el 2018. Al tiempo