“10 DE MAYO”
Carmelo Corripio Pineda “El Búho”
Sus negocios de estupefacientes los buscaba en distintas partes del mundo; para obtenerlos entraba personalmente en contacto con sociedades de diferentes países. “Body”, conocido en su mundo con ese nombre, lo atrajo la espesura de las montañas de Málaga para cultivar amapola, opio o mariguana. La Tierra, de humedad permanente bañada por la brisa del mediterráneo, refinaba un vino de sabor dulce y de color negro transparente. Su Buquet te hacía oscilar entre la sutil embriaguez y la ilusión. En un Burdel conoció a “Lara”. Cuando la vio, se deslizaba bajo las luces del escenario, cantaba en italiano “AL DI LA” (mas allá), con una voz metálica. Lo emocionó y se estremeció levemente cuando escuchó “Mas allá del espacio infinito estás tu”. Apuró de un solo trago su vino elaborado con la uva cosechada en los viñedos de Málaga; se ruborizó al pronunciar la letra de la canción, como si no quisiera descubrir los secretos de su corazón o de su pasado apasionado. Por eso cantaba con discreción, aunque la música terminaba arrastrando todo su ser, por los abismos sin fondo de las ilusiones, bajo la edificación de los pórticos árabes, casi un coliseo que se remontan a la época de los fenicios. Ella continuaba desplazándose, incorpora, intangible, guardando dentro lo mejor de ella. Su verdadero valor empleando en sus desplazamientos sin excesos, un misterio tan enigmático que la hacía atrayente y en extremo interesante. La letra de “AL DI LA” arrobaba, su sonido un eco interminable embriagaba los corazones, la fantasía sustituyó a la razón, el ambiente narcotizado sumergía a la expectante asistencia en la ensoñación, la ilusión sustituyó a la razón, las figuras cambiaban de la motivación a la concentración. Los ánimos electrizados se encendían y apagaban, todo parecía irreal.
Body estaba tembloroso mirándola con admiración, pero “Lara” estaba incluida en el programa erótico, la asistencia sólo excluía a los menores, el plato fuerte era la cópula inusual y los desnudos de hombres y mujeres: “Recordó como su temperatura le explicó que estaba construido de una estructura emocional machista, celoso y que a las mujeres sin excepción las consideraba putas”, esa conformación sanguínea le resultaba imposible sostener relaciones duraderas con una sola pareja, de acuerdo con su educación, poder económico, impulsos y personalidad estaba destinado para que luciera, para ser admirado o temido. Sin cualidades para servir, suplicar o alagar. Su vida estaba sembrada de fantasmas, a las mujeres las tomaba y las dejaba. Se reía de los que aman eternamente, de los que creen en el amor como una lámpara de inagotable de aceite.
