Opinión

Tribuna Pública

Francisco Javier Copeño Castro

El recorrido del alcalde José Luis Abarca Velázquez por el rumbo del Mercado, debe ser fructífera para todos, porque se dio cuenta del cómo se encuentran las cosas no solo en ese centro de abasto, sino que se dio cuenta del cómo está invadida la calle del Huerto frente al mercado, donde prácticamente los comerciantes establecidos e informales tiene tapada esa arteria vehicular. También debió pasar por el área de florerías donde el líder Alfredo Jacobo Ruiz nunca ha podido hacer entender a sus agremiados y familiares que no deben tener invadido el arroyo vehicular. Por tal motivo y razón siempre se ha dicho que ha fracasado en esa cuestión. También esta misma anarquía se da en todas las áreas del mercado, pero mucho tienen que ver los mismos locatarios que no terminan de entender que lejos de beneficiarse con hacer lo que quieran y cómo quieran, siempre están siendo muy perjudicados. Se debe empezar a tener un diálogo constante entre autoridades y locatarios, tratando de llegar a acuerdos en todos los aspectos, porque siempre hemos afirmado que el mercado es como una ciudad en pequeño y donde se requieren de todos los servicios y de todas las áreas de un gobierno municipal. También se dio cuenta del espacio que se tiene en la llamada rampa y donde de concretarse el proyecto que se tiene respecto a convertirlo en otra área comercial, habrá espacios para quienes tienen invadidas entradas y escaleras de dicho centro de abasto, y aunque definitivamente no alcanzarán para todos, bien podrían liberarse espacios como el de nuestro flamante regidor de ecología Nicolás Guerrero González, quien tiene invadida una de las principales entradas del mercado. Por cierto, nos comentan que el pleito por espacios en el Andador de Altamirano, sigue su curso y cada quien juega sus cartas con sus respectivos padrinos y todavía va para largo según nos dicen nuestras fuentes y se viene n más broncas todavía, porque según parece aparecen más contratos, entregados no por esta administración, sino por la anterior y están firmados por el ex alcalde Raúl Tovar y el ex síndico Juan Manuel Martínez Carreón, obviamente apócrifos. ¿Por qué apócrifos? ¡Fácil!  ¿Cómo es posible entregar un contrato sin un espacio físico? Y todavía se hacen los dignos cuando no les quieren dar un espacio donde no lo han tenido nunca. ¡Salud y hasta la próxima!