Opinión 3

Del balcón al sótano

Eduardo Albarrán Orozco.

 

Se invertirán más de 500 millones de pesos para el saneamiento del río San Juan, según informó Andrés Guzmán, regidor de obras públicas. Lo que no sabemos en qué consiste dicho proyecto y si efectivamente este va a ser la solución al problema o tan solo será una aspirina muy cara.

Los habitantes de los márgenes del río se encuentran preocupados por lo que este proyecto pueda ocasionarles. Hay quienes piensan que sus drenajes pueden explotar en sus casas y que las aguan negras lleguen a sus casas.

La preocupación no está de más. Pero también debieron preocuparse desde hace más de 25 años, por evitar que el río se contaminara y estos vecinos no conectaran su drenaje al río.

Es positivo que el gobierno municipal participe, de alguna manera, en el programa Guerreros por la alfabetización. Por lo que informaron, hay varios métodos para lograr el mismo fin, terminar o disminuir el analfabetismo de Iguala. Ojalá y quienes estén a cargo hagan su mejor esfuerzo y no solo utilicen para construir imagen política, como siempre acostumbran, en lugar de resolver el problema.

Tal parece que este programa se está convirtiendo en simulación y en oportunidades de vivir del presupuesto. He visto a varias personas, hombres y mujeres, como coordinadores del programa, pero no conozco que tengan alguna experiencia docente y pedagógica que les permita tener las herramientas suficientes para coordinar a las y los alfabetizadores. La buena voluntad no es suficiente.

Hace unos días el regidor de Hacienda, Valentín Amador Mata, declaró que los dirigentes de las organizaciones sociales “se deben manifestar sin violencia y con respeto”. Parece que el flamante regidor tiene amnesia. Ya se le olvidó que él ha sido uno de los líderes más ofensivos y “violentos” que hay en el municipio. Ahora que es edil se espanta de lo que siempre ha hecho. Vamos a esperar cómo es que cambia su conducta. Por lo pronto hasta el modo de andar le está cambiando.

Del sótano.

Es una pena que Justino Carvajal Salgado, actual síndico administrativo, haya sido quien dio la orden para que sacaran a periodistas que cubrían una reunión con colonos, en la que se trataron asuntos de interés público.

Me recordé que nos había ofrecido a los periodistas que con él como alcalde tendríamos mejores condiciones de trabajo y libertad. Solo palabras.

La gente cambia cuando tiene poder. Ya son varias personas que le han reclamado, al tres veces precandidato a la presidencia municipal de Iguala, Justino Carvajal Salgado. Sobre todo le han señalado que es una persona que no cumple. Casualmente es lo que le decían durante las campañas políticas.

Durante la administración de Raúl Tovar Tavera fue notorio el nepotismo. En esta administración también lo hay. El regidor Andrés Guzmán tiene a su hermano en Barrios y Colonias.

Pero también hay otros defectos similares. El encargado de Gobernación, Gabriel Ocampo, además de su ignorancia en este campo de la inteligencia gubernamental, tiene a dos familiares trabajando en esta dependencia. Hay quienes dicen que son sus hijos.

Los gobiernos impositivos, autoritarios, solo demuestran su incapacidad para convencer a través del diálogo y de escuchar para gobernar mejor. Ni la administración pública, ni el gobierno, son propiedad privada. Quienes están al frente, solo están para servirnos a nosotros, a los ciudadanos y ciudadanas. Si no pueden o les incomoda servir, lo mejor es que se vayan a sus casas, a sus negocios.