Denuncian otra más
del “personal de la muerte”, en el Hospital “JSA”
Ayer por la noche circuló en redes
sociales una foto de un joven que era atendido en el Hospital General “Jorge
Soberón Acevedo” de Iguala, el cual fue intervenido quirúrgicamente de su brazo
izquierdo, donde se observaba una mancha de sangre en las sábanas, tras la
cirugía que le habían realizado.
Mientras esto le ocurría al joven, del
que sólo se sabe se llama Edgar, familiares solicitaban la atención para que lo
revisaran y le suministraran medicamento, o por lo menos limpiaran las heridas
y cambiaran las sábanas. Sin embargo, al hacer la petición a quienes se
encontraban de guardia nocturna, dijeron “que por el momento no era posible
atenderlo; que primero tendrían que ir a cenar y posteriormente lo atenderían”.
La denuncia se hizo viral, por lo
que El Diario de la Tarde investigó y buscó a familiares del
joven, quienes no quisieron dar más detalles al respecto, más lo que ya se
sabía, ante el lógico temor a posibles represalias del ya conocido “personal de
la muerte”.
No obstante, al seguir investigando,
un amigo del joven dijo que éste sufrió un accidente cuando se dirigía de su
trabajo en Taxco a esta ciudad, el pasado 25 de Diciembre, donde por las
heridas recibidas fue intervenido quirúrgicamente de su brazo, donde le
colocaron 2 clavos y una placa.
Después de un tiempo de recuperación,
a los 4 meses sintió molestias y no podía mover el brazo, por lo que el
traumatólogo de ese nosocomio le solicitó tomarse placas, y al revisar las
placas el especialista, según dijo el informante, el mismo joven le manifestó
que el médico le dijo que uno de los clavos había quedado colocado
incorrectamente y que se había desviado.
Debido a esto el día de ayer fue
programado para una nueva cirugía, donde le removerían el clavo y le pondrían
otro. La cirugía se realizó por la tarde, y aproximadamente a las 12:30 horas
fue llevado a piso a la cama 20-C, donde las heridas comenzaron a sangrar y al
solicitar que lo atendieran, el personal de la guardia nocturna dijo que no era
posible atenderle, hasta que el “sufrido personal” cenara.
Se desconoce si familiares vayan a
interponer denuncia legal al respecto. Sin embargo este es el calvario que
viven diariamente familiares y pacientes que llegan al Hospital General “Jorge
Soberán Acevedo”, donde la irresponsabilidad, la soberbia y el pésimo servicio
son el común denominador.