Abrevando


Abrevando
José Antonio Lavín Reyna

“En política, unos tiran a salir, otros salen a tirar y otros salen a que se los tiren”:
El filósofo de Güemes

¿Qué es el populismo?
A propósito de la campaña electoral de los ahora solo candidatos a presidente de México, estos hablan y seguirán hablando del concepto populismo. Se le adjudica al discurso y personalidad de López Obrador y también a Ricardo Anaya, pues algunas de las promesas de campaña de este último suenan populistas, como bajar el IVA en la frontera o reducir el costo de la gasolina e igual otras expresiones de los demás candidatos, el coordinador del Observatorio Global Mediático-UABC,  Manuel Ortiz intenta aportar elementos para que sus lectores, los cuales les comparto a ustedes,  puedan tener una opinión mas amplia de este tan traído y llevado concepto sociopolítico; reconociendo que hay mejores opiniones y sobre todo la suya de esta palabra.
Inicia señalando que “La Real Academia Española define al populismo: “como la Tendencia política que pretende atraerse a las clases populares” e indica que es usado más en sentido despectivo (http://dle.rae.es/?id=TfyMi6t). Justamente esta última expresión es la que conduce a la generalidad de las personas a darle un sentido negativo y lo vinculan con la palabra populacho, que indica lo proveniente de las clases bajas de una sociedad”.
“Ernesto Laclau ("La razón populista", FCE, 2005) señala la vaguedad del concepto y su diversidad de tratamiento por los intelectuales y políticos; algunos de estos refieren que hay dictaduras populistas, democracias populistas (aquellas que convocan a referendos y a la participación), populismos reaccionarios y el populismo de los políticos. Además indica que hay tres dicotomías en el concepto: pueblo vs oligarquía; las masas trabajadoras vs los explotadores o nacionalismo vs intervención extranjera y afirma que hay una fuerte condena ética a los movimientos populistas, pues “El populismo no sólo ha sido degradado, también ha sido denigrado” (Laclau: 34)”.
“Laclau enumera tres rasgos para entender al populismo: 1) El populismo no es un movimiento, sino una lógica política que busca institucionalizar las demandas sociales; 2) la heterogeneidad de las demandas implica que el discurso político va a ser impreciso y fluctuante y es una característica, pero no necesariamente peyorativa y 3) en el populismo, al existir una demanda particular insatisfecha, ésta se vincula solidariamente con otras demandas insatisfechas, lo cual la convierte en una cadena que es interdependiente entre sus eslabones. Una idea importante que señala Laclau es que el populismo no es privativo de organizaciones, líderes, sindicatos, ejercito o partidos políticos, pues el “populismo no define la política de las organizaciones, sino una forma de articular sus temas -cualesquiera que estos sean”. (Ernesto Laclau, 'Populismo: ¿Qué nos dice su nombre?' En "El Populismo como espejo de la democracia" de Francisco Paniza, FCE, 2009: 65)”.
Termina Manuel Ortiz señalando: “En esta resumida inducción al complejo concepto del populismo, identificamos que son los temas y no las personas, las que invocan al populismo, que puede ser tanto de derecha como de izquierda y no es privativo de una época, un personaje y menos de una región como Latinoamérica, sino de condiciones socio-históricas y demandas no satisfechas que orillan a una sociedad, no necesariamente una clase social, a reclamar su atención. ¿Usted qué opina?
Así que, debemos estar conscientes y preparados para seguir escuchando hasta el 27 de junio, día que terminan las campañas políticas de todos los candidatos, las promesas populistas de los candidatos en campaña electoral.
Algo Más…
Lo cierto es que la publicación que hice fue deliberadamente cuidada. No era una aseveración, era una pregunta, con toda la intención de provocar reacciones como se dieron. Pero sobre todo con la intención clara de llamar la atención a hechos que necesariamente deben ser atendidos con oportunidad, suficiencia y eficiencia. Cosa que no está ocurriendo actualmente.
Algunos paisanos calentanos y otros que vivían en Acapulco y Chilpancingo me han contado con pesar y recelo, que cuando escuchaban lo que sucedía en las ciudades fronterizas donde  decenas de comercios y negocios tuvieron que cerrar sus puertas por la violencia, pensaban que era una película o serie de tv, situación que entendieron cuando ellos empezaron a sufrir lo mismo en sus negocios, despachos y consultorios, lo que les obligó a cerrarlos enviando al desempleo a cientos  de ciudadanos ante el temor de que sus negocios fueran vandalizados o sus familiares o empleados fueran secuestrados o golpeados, sin que ninguna autoridad tomara cartas en el asunto, situación que les canceló su vida normal.  Uno me dijo llorando que esa situación acabó con la tranquilidad y su forma de vida, lo llevó a la psicosis total, por lo que, al igual que decenas se vieron obligados a cambiar de residencia rompiendo lazos de amistad y familiares, completo su relato, que nadie en su sano juicio, quisiera volver a vivir esa pesadilla, ahora que apenas nos estamos adaptando a nuestra nueva vida.
Como ciudadanos esperemos que pese a ser época de elecciones las autoridades de los tres niveles  tomen acciones y medidas y exista una a participación social decidida y activa. No podemos seguir aspirando a una mejor comunidad cuando ni unos ni otros hacemos lo que tenemos que hacer, y solo nos la pasamos quejándonos.
La verdad es que en Iguala la mayoría de los negocios son de subsistencia, son pequeñas unidades que le permiten a las familias allegarse ellos y su empleado-generalmente no pasan de dos- tener un ingreso que les permita ir llevándola, de por si la situación es crítica, sería más complicado para todos, por eso llegué a la conclusión que es un tema doloroso, que abre llaga, y que resultan incómodos para algunos, pero por mucho que así sea son temas que, definitivamente, no se deben soslayar. Esperemos que solo sean rumores que no afecten a la raquítica economía del pueblo, donde cientos sobreviven.
CCCLXXXXVIII.- Al principiar las campañas por el Municipio se vio claramente el derroche de recursos de los candidatos del PRD y PRI. Solo en el acto de inicio y los dos primeros días de campaña, ya se gastaron el dinero autorizado. Lógicamente, el IEPCEG no ha visto nada raro. Así cómo podrán los otros 9 candidatos competirles, ya que sus propuestas son iguales, por cierto, ninguna respecto a tener un primer cuadro limpio y digno, apto para ser visitado; tampoco se habla de conformar una verdadera Policía que inhiba los asaltos a casas habitación y comercios, los robos a transeúntes y de vehículos; tener una Policía vial (agentes de Tránsito) que vuelvan a poner orden en el respeto a los señalamientos  de ALTO, que de verdad sirvan para orientar e infraccionar.
Por cierto, una vez pasada la visita de AMLO, un candidato declinará por Toño Jaimes.
Debemos exigir que los candidatos a alcaldes se comprometan a reducir el salario al cuerpo edilicio con un máximo de 10 salarios mínimos diarios; a desaparecer la partida de apoyo para gestoría social a cada regidor; a suspender el apoyo para gasolina y pago de tiempo aire a celulares; a reducir a solo dos los asistentes de cada regidor y que su pago sea bajo el régimen de honorarios; a transparentar la nómina con su publicación en los estrados de la tesorería municipal, y que los ahorros sean utilizados para el mantenimiento de carros recolectores y de los parques y jardines de todo el municipio.
Es hora de decirle a la clase política: ya basta de derrochar el dinero público.
Sabías que: Las personas con formación musical tienen mejor vocabulario y capacidad de lectura.
Hasta la vista.