Noé Mondragón Norato
Policías Comunitarias: acorralar al Estado
El descontrol político y la ineficacia van configurándose como la marca de casa de la actual administración estatal
presidida por el priísta, Héctor Astudillo Flores. No en balde, la dirigencia
nacional del PRD está demandando su
renuncia al cargo. Y los hechos y acontecimientos donde
las fallas se han medido sistemáticamente con el incremento grotesco de la estadística funesta, no dejan lugar a ninguna duda sobre lo
anterior. Basta con pulsar los últimos acontecimientos.
DESORDEN POR TODOS LADOS.- Al incremento imparable de la violencia en la entidad, se han sumado los
surgimientos de grupos de Policías Comunitarias como respuesta al descontrol y la ingobernabilidad. Es decir,
llenando los espacios que el gobierno estatal no puede. Y se lee así: 1.- Los Grupos de Autodefensas y
Policías Comunitarias no le
han servido al Estado, más
que para incrementar la
violencia. Los ocho muertos
de Chacotla, municipio de Mochitlán –donde supuestamente vigila y tiene
influencia la Policía Comunitaria de Petaquillas-, levantados la noche del
pasado 30 de enero, son la prueba fehaciente del desgobierno imperante en esa zona. Y la sospecha más fuerte de este grupo, fue cuando obligaron al Ejército Mexicano a retirar un
campamento que tenían instalado en la entrada de esta última población. Pero
sobre todo, la agresión a
balazos contra turistas de la
Ciudad de México que no quisieron detener su vehículo para una revisión el
pasado 18 de marzo. Y después de la agresión, el gobernador aseguró que se
estaban librando las órdenes
de aprehensión contra los responsables. Pero
no pasó nada. 2.- El grupo de Autodefensa denominado Movimiento por la Paz, surgió en el municipio de San Miguel
Totolapan, a raíz de los secuestros masivos atribuidos al grupo delictivo Los Tequileros. Pero nació
más con fines políticos que de verdadera seguridad a la población. Porque los secuestros
y las extorsiones siguieron ocurriendo. Algunos le atribuyen su creación al
edil perredista de ese municipio, Juan Mendoza Acosta con el apoyo del ex
diputado federal desaparecido, Catalino Duarte Ortuño. Otros, lo percibieron
como un brazo de La
Familia Michoacana, liderada
por Johnny Hurtado Olascoaga, El
Pez. Pero la crisis de
seguridad en ese municipio le
está pegando muy duro al
gobierno estatal. 3.- En el municipio de Teloloapan,
surgió el 11 de enero de 2016 la Policía
Comunitaria Tecampanera, ante los altos índices de violencia, extorsiones y secuestros que sus fundadores atribuyeron a la
presencia del grupo delictivo La Familia Michoacana. El punto es
que el pasado miércoles 26 de
abril, el edil perredista de
ese municipio, Robell Urióstegui Patiño, tuvo que salir huyendo con toda su familia en helicóptero, ante las amenazas de
ser asesinado por un grupo delictivo. La Policía
Comunitaria Tecampanera guardó
silencio ante este hecho. Y
el gobierno estatal nada más proporcionó
el helicóptero para la
huida. 4.- En el municipio de Heliodoro
Castillo (Tlacotepec), apareció el pasado domingo
7 de mayo un nuevo grupo que clama por
convertirse en Policía
Comunitaria ante la expansión
de las extorsiones, los secuestros y los robos en carreteras. Lo anterior
parece una respuesta deliberada a la iniciativa gubernamental enviada
el pasado lunes 25 de abril al Congreso local, con el fin de reformar el artículo 14 de la Constitución Política de
Guerrero, que regula y
delimita las funciones de las
Policías Comunitarias. Pero estás ya
están acorralando progresivamente, al gobierno estatal. De ahí la
necesidad de nombrar un Comisionado Nacional de Seguridad
por parte de la Federación. Porque
el Estado ya fue rebasado ampliamente por las Comunitarias.
HOJEADAS DE PÁGINAS…Muy raro y atípico lo que pasó en el mitin del PRD el
pasado domingo en Chilpancingo: se exigiójusticia por el asesinato del ex secretario del PRD estatal,
Demetrio Saldívar Gómez. Pero no se demandó la
presentación con vida del ex
diputado federal perredista por el distrito 1, Catalino Duarte Ortuño, secuestrado desde el pasado martes 12 de abril. ¿Se les pasó por error a las dirigencias estatal y nacional ese asunto? ¿O en su defecto, omitirlo era la intención deliberada?