EN LA MIRA Por Rodolfo Soto Parra

Rodolfo Soto Parra

La renuncia a su militancia partidista de 27 años que hizo pública el fin de semana el dirigente de la asociación civil “Tierra y Libertad”, Bernardo Cayetano Hernández, pone en aprietos al Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Iguala, el cual desde la llegada de Mario Martínez Bustamante a la presidencia del comité municipal en dicho instituto mantienen una parálisis política y social, ante la falta de actividades con las bases y militancia que lo fortalezcan y unifiquen con rumbo al próximo proceso electoral del año 2018.
Con la partida de Bernardo Cayetano Hernández hacia otro instituto político como es el PES, sin lugar a duda que el Partido de la Revolución Democrática sufrirá las consecuencias de sus malas decisiones en la siguiente campaña de afiliación partidista, pues no se fue el dirigente, sino que se llevó también a decenas de familias (electores) que habitan en las diferentes colonias que aglutina dicha asociación civil en Iguala y que por lo menos en su presentación como nuevo dirigente del Partido Encuentro Social en Iguala fueron alrededor de mil personas.
En contra parte, a algunos ediles del Partido de la Revolución Democrática en el Ayuntamiento de Iguala como las regidoras Martha Todd Mena y Patricia Rojas Giles, a casi un año de haber asumido dicha encomienda aun no les cae el veinte sobre su función y responsabilidad que tienen como representantes de elección popular y solo se han dedicado a servir a intereses de grupo y personales, para sus allegados e incondicionales, ignorando a la base perredista que les dio su voto de confianza para que hoy se pavoneen en el lugar que están.
De continuar con dicha actitud que han asumido ambas regidoras perredistas de la actual comuna donde a decir de la ciudadanía no están respondiendo a las expectativas, mucho menos a los principios e ideología de izquierda en ser una oposición responsable, estarían contribuyendo al fracaso político del PRD en Iguala para el proceso electoral venidero del año 2018, porque eso de despachar a control remoto desde la ciudad de México para servir al grupo de la CODUC o desde el restaurante “100 por ciento natural”, la gente no lo olvida, pero cuando no se tiene el compromiso social les da igual, y sino al tiempo lo veremos.
En otro orden de ideas, les comento que a un año de la actual administración pública municipal que preside el alcalde Esteban Albarrán Mendoza, faltan por realizar varios cambios en áreas que no están funcionando, pero que por su irrelevancia pasan inadvertidas como sucede en el Centro Cultural “La Pérgola”, donde dicen los empleados que el director, Pedro Piza Casiano, es como el fantasma, porque saben que existe, pero no cuando lo van a mirar por aquello de su otra chamba en conocida Escuela Secundaria Técnica.

Por hoy es todo y recuerden que: “Comunicar es una necesidad, pero saber comunicar es un Arte”. Hasta la próxima.